HOY DIARIO DEL MAGDALENA
Líder en la región

Más de 1.500.000 venezolanos están en Colombia

En Santa Marta las autoridades estiman que hay más de 100.000 venezolanos. Por ello ha colapsado los servicios de salud, y los comedores sociales no tienen abasto para atender a tanta gente.

En departamentos como Guajira, Magdalena, Cesar y Atlántico, hay más de setecientas mil personas. Santa Marta alberga a más de 100 mil venezolanos

 

Es una crisis humanitaria sin precedentes. Cada día ingresan más venezolanos a territorio colombiano con lo cual la presencia de ciudadanos de ese país en nuestra Nación ha puesto contra las cuerdas a las autoridades de ciudades como Santa Marta, Riohacha, Valledupar, e inclusive hasta la misma Bogotá donde se estima que hay más de doscientos mil personas oriundas de la Nación bolivariana.

Muy a pesar del censo que llevó a cabo por parte del Gobierno, es mucho más el número de venezolanos que no quiso censarse, por lo que realmente una cifra exacta no se tiene con certeza, pero los estimativos señalan que hay más de un millón y medio de venezolanos en nuestro territorio-

El alarmante éxodo de venezolanos se configura como el mayor movimiento migratorio en la historia de América

La crisis migratoria de la Nación bolivariana sigue enviando a cientos de miles de ciudadanos fuera de su país de origen y Colombia es la más afectada, pues ha recibido un millón quinientas mil personas en tres años, según cifras conservadoras.

Entre tanto, los países de Latinoamérica siguen en busca de soluciones para hacer frente a la crisis que ha dejado graves efectos para la región, por lo que se buscan medidas comunes.

 Mientras la población sigue sufriendo la peor crisis jamás vista en el país y, al mismo tiempo, el chavismo se aferra al poder, crece la preocupación en la comunidad internacional.

Cada vez es mayor la ola migratoria, y los países receptores empiezan a sufrir las consecuencias, pese a los grandes esfuerzos realizados.

Hasta agosto de este año, fueron 3.029.240 los venezolanos que decidieron huir de la crisis para buscar un mejor futuro en otras tierras. Colombia, que cuenta con una extensa frontera con Venezuela, es el país que más migrantes recibió (1.500.000), seguido por Perú (410.000) y los Estados Unidos (390.000).

La lista de los diez más receptores la completan: Chile (240.000), España (230.000), Ecuador (180.000), Argentina (120.000), México (95.000), Panamá (80.000) y Brasil (59.000).

Crisis económica, desabastecimiento de alimentos y medicinas, la mayor inseguridad de la región, presencia de grupos criminales afines al régimen chavista y un Gobierno que persigue y amedrenta a todo aquel que no se alinea a «la revolución». Esos son los principales factores por lo que millones de venezolanos deciden dejar todo atrás para migrar.

Desde el año pasado, mes a mes, la corriente migratoria fue creciendo progresivamente y, aunque ya es de las mayores de la historia, todavía no se ha detenido. En ese sentido, la ONU adelantó que creará un equipo para atender la crisis.

Ese equipo, que respaldará principalmente a Colombia, incluirá expertos de su agencia de refugiados y de la Organización Internacional para las Migraciones, entre otras dependencias del organismo.

«Vamos a estudiar en el Consejo de Ministros que se declare la emergencia económica y social en La Guajira», manifestó el canciller Carlos Holmes Trujillo.

«Nosotros los hemos acogido con fraternidad, pero necesitamos que este esfuerzo no sea solo de Colombia (…) Entre varios países de América Latina, podemos atender esta situación con una política concertada», señaló Duque, en un claro pedido de apoyo por parte de los países de la región.

El Presidente Duque solicitó la colaboración de los países vecinos para atender la crisis migratoria de los  venezolanos

Mientras millones de venezolanos abandonan el país por la grave escasez de alimentos y medicinas, el régimen chavista no solo continúa negando la existencia de una crisis humanitaria, sino que también se burla de sus compatriotas que huyen de la hambruna.

EL COSTO

Con un flujo migratorio de venezolanos que aún no ha finalizado, el presidente Iván Duque aseguró ayer que el impacto fiscal de la crisis (costo para el país) “puede ser del orden de 0,5 por ciento del Producto Interno Bruto, PIB. Obviamente queremos mirar cómo eso se ve reflejado en salud, en educación, en infraestructura y muchos bienes públicos”

Tomando en cuenta el consolidado de 2017, la cifra anunciada por el presidente llega a los 2,75 billones de pesos.

La paradoja es que esta cifra es muy similar al impacto del Acuerdo de Paz en el PIB, que es de 0.4 %, en un horizonte de 5 años, según los cálculos del Índice del Conflicto en Colombia (ICOC), a inicios de 2017. Este resultado, en este caso, contrario al tema de la migración venezolana, es positivo, pues se refiere a lo que aumentaría presupuestalmente Colombia.

El anuncio lo hizo el mandatario a días de conocerse cómo quedará el documento Conpes que establecerá los rubros y las rutas de atención institucional para la migración desde el país vecino.

Aún así, las cifras pueden no ser definitivas en razón a que el fenómeno no ha concluido y, por ello, su impacto económico y social aún no podría ser medido íntegramente.

Ronal Rodríguez, investigador del Observatorio de Venezuela de la Universidad del Rosario, aseguró que “es muy complejo hacer un balance con todos los sectores involucrados y por ello hay que ser cuidadosos en dar el mensaje que la migración venezolana son solo costos”.

Agregó que la dificultad en elaborar un registro de cuánto aportan los venezolanos al sistema económico colombiano reside en que muchos de ellos han tenido que conminar sus esfuerzos con capital colombiano, para poder integrarse en el sistema. “Hay franquicias que son venezolanas, pero que aparecen en el mercado con nombres colombianos”.

El impacto laboral también tiene una enorme dificultad por la informalidad.

“La ola migratoria está generando una presión de gasto público para resolver necesidades urgentes”, afirmó Ramón Javier Mesa Callejas, docente de la facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Antioquia, quien agregó que “es preocupante que la mano de obra venezolana desplace al colombiano, porque eso está motivando una mayor informalidad al comercio colombiano”, al resaltar que al trabajador venezolano no se le estaría pagando seguridad social o salud.

En febrero, la Cancillería informó que al menos 600 empresas colombianas fueron sancionadas por contratar irregularmente a venezolanos.

Eso “tiene efectos a mediano y largo plazo, por una menor tributación. Eso es delicado para una economía como la colombiana”, concluyó.

Por otro lado, Colombia contará con un músculo financiero en la ayuda de Estados Unidos, que en julio pasado anunció que otorgará seis millones de dólares adicionales a los 26 millones que ya ofreció a Colombia para atender a los miles de venezolanos que ingresan a su territorio huyendo de la crisis.

Esto habla de unos 94.784 millones de pesos para atender a una población que habría superado ya al millón de personas, pero que de ellos, el 44% son irregulares .

PLAN ESPECIAL DE VIGILANCIA EN ZONAS DE FRONTERA

El Viceprocurador General de la Nación, Juan Carlos Cortes González, reveló que el Ministerio Público en la zona de frontera con Venezuela permanece en alerta para garantizar que haya respeto a la soberanía nacional y a los derechos de los colombianos, ante posibles incursiones irregulares de militares del vecino país en el territorio nacional.

 “Desplegamos una estrategia territorial en la entidad, que incluye a los personeros de esos municipios, para estar alertas de lo que pasa en la frontera, tal como lo hicimos cuando se presentó la incursión de tropas en Arauquita, en marzo de 2017”.

Cortés González aseguró que la posición de la Procuraduría frente a la crisis que vive el país vecino, es la de “promover la democracia con más democracia. No es un momento para subir los ánimos y responder con bravuconerias”.

RESPUESTA REGIONAL

Por su parte, el Vicepresidente del Banco Mundial para América Latina y el Caribe, Jorge Familiar, subrayó el liderazgo de Colombia en muchos frentes, sobre todo en el relacionado con el éxodo venezolano, que necesita una respuesta regional.

 “Este es un problema de naturaleza regional y que va a requerir una respuesta de tipo regional”, dijo.

“Nos encontramos aquí con un Gobierno que lleva muy pocas semanas, pero que tiene una agenda muy ambiciosa y está empezando a tener acciones y a dar resultados en temas que son críticos para el desarrollo del país y que son críticos para el desarrollo de todos los países de la región como son la competitividad y la productividad”, sostuvo el alto directivo del Banco Mundial.

Por último, señaló que el reporte que dará a conocer en los próximos días el Banco Mundial, en conjunto con agencias de las Naciones Unidas que tratan temas de migrantes y refugiados, sobre el impacto de la crisis migratoria en Colombia, “será una contribución para el país”, y también para la región.

Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia. Asumiremos que está de acuerdo con esto, pero puede optar por no participar si lo desea. Aceptar Leer más