“Lo que le dio Medellín a Nicky Jam fue amor”: Diego Cadavid

Diego Cadavid confiesa que lo dudó. Cuando conoció el proyecto de ‘Nicky Jam, El Ganador’, no entendía bien por qué hacían una serie sobre la vida de un reggaetonero, pero al conocer la historia de la vida de este artista, sus caídas y grandes logros, se dio cuenta de que era una producción en la cual valía la pena participar.

El reto en esta serie que pronto estrenará Netflix era doble para el actor antioqueño. Por un lado, haría el papel de manager de Nicky Jam, y por el otro, la mayor parte de sus escenas las haría actuando al lado del propio cantante, quien hace su debut en la actuación interpretándose a sí mismo.

Cadavid, actor, músico y fotógrafo, quien ahora vive entre Colombia y México, habló con Colprensa sobre lo que fue su experiencia trabajando en esta nueva producción de Netflix en Colombia.

 

Puro Flow

¿Cómo era su relación con Nicky Jam antes de la idea de hacer la serie?

Sabía claramente quien era. Yo soy de Medellín y hay mucha cultura sobre esta música allí. Además, yo soy músico y tengo muchos colegas que habían trabajado con él, pero sabía muy poco de su pasado oscuro.

Al conocerlo todo cambió. Estuve más de un mes con él en trabajo de campo y con un chat entre Nicky, el manager y yo, para hablar todo el día para conocer al verdadero Nicky.

 

¿Ya había trabajado con personajes reales?

A mí curiosamente me han tocado muchos personajes biográficos, y en este caso, tenemos un arma de doble filo al tener al personaje vivo. Es muy importante al tenerlo al lado y preguntarle todo, pero también está la otra parte y es que, al tenerlo al lado, puedo hacer cosas que no le gusten y se va a disgustar.

Fue una herramienta increíble. Como se lo dije a él, no quería ser una copia, aunque intentamos parecernos lo más posible, con un cambio físico rudo, lo que más me interesaba era encontrarme con su corazón, cuál es su origen y su alma. Creo que lo encontré.

 

¿Cómo fue ese primer encuentro con Nicky Jam?

Me citó en su apartamento en Medellín y resulta que estaban arreglando algo en su apartamento y decidió bajar al lobby, por lo que nos conocimos tomando gaseosa sentados en el andén frente al edificio donde vive.

No hablamos de la serie, nos la pasamos contando chistes y mirando mujeres en Instagram. Me encontré con un niño como yo y eso me encantó. Al principio estaba asustado al pensar en pasar meses con una estrella de la música, sin saber cómo era y sin saber si actuaba o no. Si un actor tiene un mal actor al frente se le va su actuación al piso.

Usted interpreta al manager y mejor amigo del artista, ¿Cómo fue el trabajo en escena con Nicky Jam?

Juan Diego Medina, su mánager, estaba realmente preocupado, porque me decía, “si Nicky no está contento se levanta y se va, necesitamos que esté contento”, y creo que fue clave lograr una muy buena relación entre los dos y hacer click desde el primer día.

 

¿Qué significa para Diego Cadavid trabajar en esta serie?

Para mí, contar su vida, estando él todos los días ahí, había que hacerlo bien, con toda la sensibilidad de lo que había vivido, empezando con la historia de su mamá, la cual siempre lo hacía llorar.

 

¿Necesitó de un cambio físico para su personaje?

Me raparon completamente, me quitaron la barba, me quitaron un poco las cejas y me tocó subir de peso, porque mi personaje tuvo su época de gordo, aunque ahora está más flaco, y todo ese cambio me tocó hacerlo en un mes, comiendo como un loco.

 

¿Qué fue lo más difícil en esa preparación?

Estudiar uno a uno los ademanes físicos. Los reggaetoneros y raperos tienen cosas muy parecidas, desde el caminado. Fue un trabajo genial, es delicioso para uno como actor, me encanta que me toquen personajes con este tipo de exigencias.

 

¿Cuál creé que es la clave del éxito de Nicky Jam?

Juan Diego, quien es de Medellín como yo, tiene una cultura de lo familiar muy fuerte, donde la familia es primero. Cuando se conocieron Juan Diego no era manager, no sabía nada de eso, pero sí sabía mucho del género.

Una relación en la que Nicky comenzó muy desconfiado, luego de ver como muchos otros tipos habían llegado a sacarle plata, pero lo primero que hace Juan Diego era arreglarle su familia, reunirla. Ellos son como hermanos, están a toda hora echando chistes, hablando de mujeres, pero de un momento a otro terminan hablando de campañas de lanzamiento de millones de dólares.

Es una relación de amigos, que hacen negocios pero que le arregla la vida, que le ayuda para que pare el consumo de drogas, y en especial, lo que le dio Medellín a Nicky Jam fue amor, para que él volviera a confiar en sí mismo.  

 

 

De músico a músico

¿Difícil actuar con personajes en torno a la música?

Para mí fue cómodo porque trabajo en música desde hace algunos años con mi banda de rock, conocí mil managers, pero lo de Juan Diego es un fenómeno, porque él tiene 30 años y trabaja con Nicky desde los 24 años. Una creatividad constante necesaria para el mundo de la música de hoy y más con el reggaetón, que sacan una canción al mes.  

Las veces que me ha tocado uno tiene técnicas para estar cerca de los instrumentos y se me hace fácil, pero tienen una sensibilidad especial, que no se les ve mucho, muy bohemios, todo le duele y tratamos de reflejar eso más allá de las palabras.

 

¿Cómo es Nicky actuando?

Es como un niño inquieto, y como ya no consume drogas, sus ansiedades son otras, como no dejar las piernas quietas, lo que hacía ruido con los micrófonos.

Pero, por otro lado, es una persona con una humildad impresionante que lo preguntaba todo. Es lo que lo hace valioso como artista, que merece todo lo que tiene, porque él es un rapero de Boston.

 

¿Cómo fue el trabajo con Jessy Terrero, el director?

Fue una ventaja tenerlo como director porque él ha trabajado con todos los raperos, como 50 Cents, trabajó con Tupac, por lo que nos da toda la esencia del rap, de los barrios bajos de Nueva York y le da un look tremendo a la serie.

 

¿Qué fue lo que más le gustó de la serie?

La honestidad con la que se cuenta la serie. Nicky se pasa de honesto y siempre quiso que la serie fuera así incluso cortó escenas diciendo que eso no había pasado así e intentábamos explicarle que al final era dramaturgia, pero a él no le importaba. Es una serie donde hay verdad.

No es un culto al ego, él quería contar su verdad y cómo fue su renacer, mostrarle al mundo que a cualquier edad se puede renacer.

 

¿Cómo era la relación con Nicky en medio de las grabaciones?

Hablamos de música todo el tiempo. Resultó ser súper roquero. Se la pasaba todo el tiempo mostrándome canciones rock. Con todo cariño yo le decía: “me resultó roquero el regguetonero” (risas).

Lo curioso es que me tocó ver todo el proceso de creación de ‘X’ con sus maquetas y cómo se iba a llamar de otra forma, lo que me permitió ver el trabajo duro de hacer un éxito.

 

Bogotá Colprensa