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Así vive Venezuela otro gran apagón
Comunicarse con Venezuela en medio del apagón nacional es difícil. Los mensajes no llegan, las llamadas no entran y cuando una persona logra conexión evita usar el teléfono para no gastarse la batería que le queda. Con la caída de la red eléctrica también colapsa el sistema de comunicaciones, el metro de Caracas deja de funcionar y la gente corre por llegar a sus casas antes de que caiga la luz del día.
Y ese es el panorama que vive el país desde la tarde de ayer, cuando se presentó un nuevo apagón que afectó a 23 de los 24 Estados, incluida Caracas, el distrito capital, de acuerdo con el Observatorio de Servicios Públicos. El panorama es aún más crítico porque para este martes se esperaban marchas convocadas por el presidente interino y líder opositor, Juan Guaidó.
De ese nuevo apagón nacional que comenzó ayer, ya van casi 20 horas desde que la empresa estatal Corpoelec –controlada por el oficialismo– reportó la falla. El mandatario, Nicolás Maduro, atribuyó la falla a un “ataque de carácter electromagnético” contra el sistema de generación eléctrica de Guayana y aseguró que aplicó protocolos para restablecer el sistema.
Ese mismo discurso lo utilizó en marzo, cuando Venezuela vivió el peor apagón de su historia que duró siete días, aunque el servicio se restableció antes de ese lapso en lugares como Caracas.
En la mañana de este martes, cuando el servicio comenzaba a restablecerse, hubo otro bajón eléctrico. Para las 11 de la mañana, hora de Venezuela, el servicio se ha restablecido en algunas zonas, pero la falla persiste.
Venezuela, en comunicación intermitente
Aunque este lunes parte del país amaneció sin luz, no es un panorama nuevo. Estados como Zulia coexisten con la falta de electricidad y la incertidumbre de que tal vez, al llegar a casa, no podrán encender un bombillo para ver o una estufa para cocinar.
Nada más desde el fin de semana, antes de que se registrara este nuevo apagón, EL COLOMBIANO intentó comunicarse con un líder estudiantil que vive en Puertos de Alta Gracia, en Zulia. Cuando el joven llegó a su casa para hacer la llamada quedó incomunicado: no había luz, la red estaba caída y tuvo que esperar hasta el día siguiente para reportarse.
La situación de Venezuela llegó a un punto en el que las agencias de noticias dependen de un sistema propio para enviar información con rapidez por la falta de conexión en la red nacional y periódicos como El Nacional, de Caracas, operan gracias a una planta eléctrica propia que funciona para estos casos.
“Algunas zonas, aunque tienen luz, no tienen servicio ni de telefonía ni de internet”, contó una de sus periodistas.
Este escenario lleva a que la comunicación se reduzca a escuetos mensajes de chats, llamadas con interferencia o reportes de redes sociales.
Un venezolano que vive en Bogotá, Gabriel Valles, pudo comunicarse con su familia en Acarigua, Estado Portuguesa. El reporte: “17 horas sin Luz, tres meses sin gas y un año sin agua, pero estamos bien”.
Son más de 14 horas de #ApagónNacional. En 7 estados del país se restableció el servicio de manera parcial y 9 aún continúan sin luz. Para los venezolanos no es opción acostumbrarnos a esta tragedia.
— Juan Guaidó (@jguaido) 23 de julio de 2019
La incertidumbre no solo invade los hogares, también los centros médicos. De acuerdo con Médicos por la Salud, para las 8 de la mañana de este martes el Hospital Universitario y el Patricio Alcalá no tenían servicio eléctrico. En total, eran nueve hospitales en el país en los que aún no se restablecía el servicio.
El Colombiano
