Expectativa por la paz de Duque como nuevo presidente

El presidente electo de Colombia, Iván Duque, tendrá que lidiar con la paz como uno sus principales retos. Hoy se mantiene la expectativa sobre lo que pueda pasar en esta materia, debido a que como dijo en campaña, tiene intención de hacerle modificaciones  a los acuerdos con las FARC y poner otras condiciones a los diálogos de paz con el ELN.

En esta línea el lunes logró que el Congreso de la República aplazara para la próxima legislatura el trámite del proyecto de ley por medio del cual se define el reglamento de la Justicia Especial de Paz (JEP), núcleo de los acuerdos de paz de La Habana. A pesar de esto, el presidente en ejercicio, Juan Manuel Santos, anunció que este miércoles definirá si llama a extras al Congreso para estudiar la reglamentación de la JEP. Por lo que resta esperar cómo se desarrolla este pulso.

Lo cierto es que pese a que durante su campaña Duque fue enfático en las fallas del acuerdo de paz, en su  primer discurso tras confirmarse su elección, hizo un llamado a la reconciliación y moderó el mismo afirmando que no destruiría lo que se pactó con las FARC.

“Esa paz que reclama correcciones (…) No vamos a hacer trizas los acuerdos, pero vamos a garantizar que la paz sea para todos los colombianos, empezando porque la seguridad y la justicia sean las hermanas indicadas para que brille en todo el territorio colombiano”, dijo Duque y añadió que la paz que todos añoramos es la que nos tiene que llevar a un sano debate de ideas, “porque si los cultivos ilícitos siguen creciendo en nuestro país y amenazando la seguridad nacional, si aparecen dineros y armas escondidas, si vemos que hay algunos que permiten seguir obstruyendo el curso del país, ahí lo que estamos haciendo es fracturando el anhelo de la paz”.

Por su parte, el consejo político nacional del partido Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC) expresó su disposición de reunirse con Iván Duque para exponer sus puntos de vista sobre la implementación del acuerdo de paz.

“La totalidad de las fuerzas políticas, económicas y sociales que respaldan el programa de gobierno del candidato Iván Duque, no pueden llamarse a engaños, frente a la responsabilidad que pesa sobre sus hombros en este momento histórico”, expresó Rodrigo Londoño, jefe del movimiento político nacido tras los acuerdos de paz.

De acuerdo a Londoño, “interpretar el resultado como una patente para desconocer lo andado en materia de paz y burlar los compromisos adquiridos por el Estado frente a la sociedad colombiana y la comunidad internacional, lo único que logrará será llevar a la Nación a un nuevo ciclo de múltiples violencias, algo que las generaciones presentes y futuras jamás perdonarían”.

Londoño llamó a “que se imponga la sensatez; lo que el país demanda es una paz integral, que nos conduzca a la esperada reconciliación, basada en el bienestar social, la verdad, la justicia, la reparación integral a las víctimas del conflicto y la garantía de no repetición. Burlar ese propósito no puede ser plan de Gobierno”.

El líder de las FARC manifestó que “se hace más urgente la unidad de todos los sectores, que creemos en la posibilidad de un futuro distinto al camino por el que se ha conducido la Nación desde la declaración de nuestra independencia. El resultado electoral de la Colombia Humana, muestra que sí es posible”.

Por su parte, del Ejército de Liberación Nacional (ELN) le manifestó a Duque que debido a los resultados de las elecciones del pasado domingo, está obligado a continuar con los proceso de paz.
“Esos 8 millones (votos obtenidos por Gustavo Petro) de colombianas y colombianos hacen una apuesta por la paz y obligan al Gobierno resultante y al propio ELN a trabajar con intensidad para terminar el conflicto armado y acordar transformaciones en la búsqueda de una Colombia en paz y equidad”, expresó el ELN a través de un comunicado.

Este martes, Duque dijo que espera informarse de cómo va el proceso de paz con esta guerrilla y ratificó, como dijo en campaña, que la única manera de seguir adelante sería si el ELN acepta concentrarse con supervisión internacional.

Para Kenneth Burbano Villamarin, director Observatorio Constitucional Universidad Libre, si el presidente electo y su nuevo gobierno desean cumplir con lo prometido, no hay alternativa distinta a continuar con el proceso de paz que se hizo con las FARC, en razón a que sus exintegrantes están en la vida civil, se desmovilizaron, entregaron las armas y se acogieron al acuerdo final de paz.

“Todo lo anterior tiene respaldo constitucional y la salvaguarda de la jurisprudencia de la Corte Constitucional, en ese sentido no puede haber modificaciones al acuerdo, eso ya concluyó. Las modificaciones pueden darse en la implementación legal, sin que haya regresividad en materia de derechos humanos y sin violar lo acordado”, agrega el experto.

En cuanto al ELN, según Kenneth, la situación es igual en cuanto al mandato constitucional que obliga al presidente de la República a buscar el logro y mantenimiento de la paz, porque se trata de un derecho y un deber de obligatorio cumplimiento y agrega que “los términos en que se va a hacer esa negociación, la deben acordar las partes, teniendo como mínimo el respeto de las normas humanitarias, en especial dejar por fuera del conflicto armado a la población civil, lo mejor sería pactar un cese bilateral al fuego”.

Ariel Ávila, subdirector de la  fundación Paz y Reconciliación, afirma que hasta el momento hay incertidumbre frente a la paz, pero lo que está claro es que no se va hacer la reforma agraria que estaba contemplada en los acuerdos de  paz con las FARC,  que se va a modificar la JEP y que el nuevo gobierno va a tener que administrar la paz.

“Con el tema del ELN,  ese proceso  está condenado a morir porque las condiciones que ha anunciado gente cercana al presidente electo, son imposibles de cumplir para ellos, como lo es la concentración antes de negociar. Eso no va a pasar”, señala Ávila. Según este experto, a la paz, tal y como se conoce hoy, le vienen momentos difíciles. “Va a haber otra paz, no sé cuál será, pero va a haber otra”.

Bogotá Colprensa.