Los All Blacks, sin piedad con Francia

La selección de rugby de Nueva Zelanda logró un pleno de triunfos en la serie de tres partidos amistosos contra Francia, que concluyó este sábado con una nueva y contundente victoria de los All Blacks por 49-14 en Dunedi, con siete tries de regalo para sus hinchas. 

Los vigentes bicampeones del mundo, que ya se habían impuesto en los dos anteriores test-matches celebrados en Auckland (52-11) y en Wellington (26-13), esta vez encontraron más oposición hasta el inicio del segundo tiempo (21-14 hasta el minuto 47), pero acabaron venciendo con comodidad tras apoyar siete tries.

 

Rieko Ioane anotó un deslumbrante triplete en la segunda parte para júbilo de los 27.807 espectadores que se dieron cita en el Forsyth Barr Stadium. 

A pesar de que los All Blacks presentaron varios cambios en su formación, la velocidad de los locales marcó un partido en el que Francia resistió el intercambio de golpes en la primera media hora, y generó algo de misterio y suspenso cuando el marcador se puso 14-14. 

 

Pero después del primero de los dos tries que apoyó McKenzie –que contó con la colaboración del árbitro John Lacey, quien accidentalmente se cruzó en el camino de Baptiste Serin– el tanteador de 21-14 favorable a los hombres de negro marcó un punto de inflexión en el encuentro. 

El balance de 127 puntos y 19 tries encajados por el XV de Francia durante esta serie de tres test-matches resulta difícil de digerir para el combinado galo y pone de manifiesto la brecha actual que existe entre los dos equipos a quince meses del Mundial-2019 en Japón.