‘Los hijos son nuestro reflejo’

El coronel Gustavo Berdugo Garavito reconoce que sus hijos son la razón de ser de su matrimonio y que a pesar de la distancia, sienten su apoyo y respaldo. / LUIS PARRA.

Tomar la decisión de ser unos abanderados de la seguridad y la convivencia ciudadana no es fácil para muchos policías y menos, en un país como el nuestro donde la violencia ha generado zozobra en gran parte de la población.

Y es así, como esa misma vocación de servicio que tienen para tantos civiles, se la brindan a su propia familia: esposas, padres e hijos que los esperan pacientemente, mientras viven trasegando por el país cumpliéndole a la Patria, pero desvelados por lo que sucede en casa y desde la distancia, tratando de apoyar en lo que más puedan a sus seres queridos.

Esa ha sido la constante del hoy coronel Gustavo Berdugo Garavito, quien desde hace 25 años inició su carrera policial en la capital de la República; el mismo tiempo que tiene compartiendo vida marital al lado de Jackeline Rodríguez Castro, con quien tiene dos hijos que ya son jóvenes: María Paula, de 23 años y Juan Sebastián, que cumplió 20 años.

Ella estudia en Canadá, y él en Bogotá, pero eso no ha sido impedimento para que se desprendan de casa y acompañen con toda disposición al coronel Berdugo, a donde vaya; son su energía y motor para desempeñar con ahínco y responsabilidad su labor con el país y la comunidad.

“Desde niños he compartido con ellos, he estado presente en esas etapas especiales que han vivido, de su colegio y en estos momentos la Universidad. Siempre hemos estado muy unidos, hay una comunicación muy importante y eso nos da confianza”, expresó quien desde hace diez meses, se trasladó a ‘La Perla de América’ para tomar el cargo de la Comandancia de la Policía Metropolitana de Santa Marta.

Este servidor público sostiene que sus hijos son la razón de su matrimonio: “Nos sentimos muy felices de poder compartir y es así, que la distancia que en este momento tenemos, se mantiene por esa educación, los principios; esos valores que en ese momento pudieron recibir, ha fortalecido y solidificado esa relación entre mis hijos y yo”.

Sus progenitores han sido los mayores referentes para el coronel Berdugo, en su ejercicio como papá, indudablemente; él es el cuarto de cinco hijos (tres hombres y dos mujeres), en un hogar que se formó en el municipio de Soatá, Boyacá, municipio donde aún conserva parte de esa familia extendida.

 

CERCANÍA Y AUSENCIA

En una Institución que exige tanto, como es la Policía Nacional, ha resultado un poco complejo para el Comandante de la Policía Metropolitana de Santa Marta desempeñar su rol de padre, dado los diferentes rangos que ha ocupado y que lo han ausentado de algunos momentos importantes con sus hijos, pero él afirma que ha tratado de integrar su actividad operativa, con su papel de paternidad.

“Lo que he hecho para que uno no tenga esos vacíos en esas fechas especiales, la estrategia ha sido casi que hacerlos parte de esta familia policial. Esos momentos en los que uno no puede estar en casa, lo que hago es acercarlos aquí, que compartan esas fechas especiales y nos vemos como una sola familia. Esa ha sido la forma de superar esas  celebraciones y momentos donde ellos participan. La Policía realiza cosas muy bonitas con la familia, con los niños… nos integramos y eso hace que seamos felices”, manifestó.

Precisamente, durante este tiempo como padre, el coronel Berdugo hizo memoria durante esta entrevista aquellos momentos que recuerda con cariño y que lo han marcado como papá, estando cerca de sus hijos; cuenta que, sin duda, con María Paula “le dio durísimo” ver esa transformación de niña a mujer y que le permitió comprender que “los hijos no son los mismos, se crecen y requieren un afecto más grande, de manera muy especial, escucharlos y ayudarles frente a esos nuevos cambios de vida que tienen”.

“Uno de ellos fue cuando mi hijo empezó a estudiar, tenía 4 añitos y tuvo que irse en su ruta solo; ese primer día de colegio botó todo: el buzo, elementos que después fuimos a reclamar a la profesora y  allá en el colegio nos dijeron que él tenía que empezar a tener responsabilidad, que los profesores no estaban para cuidar las cosas de los pequeños, entonces fue cuando nos dimos cuenta que él empezaba a enfrentar el mundo”, recordó el coronel Berdugo con nostalgia.

Asimismo, se considera un padre para sus subalternos; cree tener mucho de papá para los patrulleros, auxiliares, intendentes y tantos policías que tiene a su cargo diariamente, lo que hace que se sienta orgulloso en pro de su bienestar, porque si a ellos les va bien, a él también.

 «Lo que uno busca es cuidarlos, protegerlos, que siempre hagan las cosas bien. En todo momento siempre les estoy dando recomendaciones, los estoy orientando en la parte de su salud, presentación personal, los procedimientos que van a adelantar: una comunicación constante, permanente, reiterativa, siempre buscando el bien de ellos”.

 

MENSAJE

Para esta fecha en que se celebra el Día del Padre, este es el mensaje que entrega el coronel Berdugo: “No dejemos a nuestros hijos solos, hay que cuidarlos porque ellos necesitan de todo nuestro apoyo frente a esas dificultades y riesgos diarios. Debemos estar más con nuestros hijos, protegiéndolos y dándoles afecto y mucho cariño, porque eso es lo que hace falta en el mundo: para que la violencia no sea un factor determinante en nuestros hogares. Que se sientan orgullosos de tener unos hijos que son su reflejo, es verse uno mismo en ellos, que compartan y lo importante es ser felices sin importar las condiciones”.