HOY DIARIO DEL MAGDALENA
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Todos quieren agendar el gobierno de Duque

El futuro de Colombia depende del éxito del presidente Iván Duque, quien  debe ejercer sus funciones acordes con el programa de gobierno que presentó, defendió y triunfó en las elecciones y según lo dispone la Constitución colombiana en su artículo 115, en ejercicio de los  roles de Jefe de Estado, Jefe de Gobierno y suprema autoridad administrativa.

Por lo anterior, no entendemos el por qué hay tantas personas interesadas en agendar la administración del presidente electo, unos con un interés malsano y marcado de entorpecer desde ya, su labor como primer mandatario y así sacar dividendos políticos y electorales, como es el caso dePetro, que ha salido a tratar de “darle” ordenes al ganador de las elecciones, cobijándose bajo el argumento que sacó 8 millones de votos.

No es recomendable que el doctor Duque, bajo ningún punto caiga en el juego de quien fue su contendor en segunda vuelta, el país conoce la dialéctica de este,  y el escenario natural para que la  ejerza como oposición, es el congreso, donde tendrá un escaño en el Senado, donde encontrará una bancada del partidos de gobierno que le responderá con argumentos y no con amenazas de medidas populistas.

La gran mayoría de los colombianos sabemos que la JEP es un engendro jurídico, creado para garantizarle la impunidad a los exguerrilleros de las Farc, y perseguir a los miembros de nuestras Fuerzas Armadas, por ello el presidente Duque no puede caer en la trampa de los “farianos” camuflados, que pretenden seguir colgados del presupuesto público, bajo la falacia de estar defendiendo la paz,el cual llevan 8 años usufructuándolo con puestos públicos y  la contratación estatal. Muy seguramente será el Congreso el escenario donde se propongan  las modificaciones al acuerdo, que permitan su adecuación a la Constitución y permitan continuar con la implementación del mismo, sin que este sea la política pública más importante del gobierno naciente.

Los cantos de sirena, nunca son bueno para los gobernantes, así y provengan de su mismo partido, si bien gano el No en el plebiscito y el doctor Duque triunfó en la elecciones presidenciales, el electo presidente debe sostener su palabra de no volver trizas el acuerdo de la Habana.

Hoy vemos y leemos a muchos columnistas y periodistas del interior, antes, santistas furibundos durante 8 años, declarados enemigos acérrimos de la candidatura Duque, dando la vuelta y ahora comienzan a alabar al presidente Duque y atacar y responsabilizar al doctor Uribe de todos los males que nos deja Santos. Esos son los peores, los aduladores y lambones de profesión, no son buenos concejeros y son lo que siguen defendiendo la paz con el propósito de entorpecer la gestión futura del presidente Duque.

El próximo primer mandatario, debe gobernar con sus ideas, con el equipo que él crea, el mejor para resolver los problemas de desigualdad, equidad, pobreza, de salud, de educación, de vías, de servicios públicos domiciliarios, de seguridad y por encima de todo debe tomar el toro por los cachos del cáncer de la corrupción y adoptar medidas urgentes y drásticas contra este flagelo de nuestra sociedad.

¿Sabes qué? Nadie tiene la autoridad y la legitimidad política para gobernar, sino Iván Duque que fue elegido por el pueblo colombiano, por ello es un atrevimiento tratar de agendar su gobierno.

Catedrático universitario

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