Minhacienda desvirtuó acusaciones de Robledo

El Minhacienda Alberto Carrasquilla negó anoche en el Congreso que haya cometido irregularidades alrededor de los llamados ´Bonos de agua´.

El promocionado debate de control político contra el ministro de Hacienda, Alberto Carraquilla, por su responsabilidad por los llamados ‘Bonos Agua’, quedó en ná.

 

La sesión, escuchó a los senadores Jorge Robledo y Alexander López hablar de los bonos mientras que el jefe de la cartera económica ha usado en algunas oportunidades un tono sarcástico y ha dicho que Robledo tiene una mente “perversa y ensoñándose en teorías de conspiración”.

“Estoy acá no solo con cuero grueso, estoy acá para desmentir las injurias, calumnias y verdad a medias de las dos últimas semanas y de Robledo”, señaló Carrasquilla.

Explicó que la reforma constitucional y la posterior ley que reformó el sistema general de participación no fue ideada por él para su lucro particular. Aclaró que parte del 2007 estuvo fuera del país, momento en que se tramitaron esas normas. “Estaba construyendo mis crímenes en el exterior”, dijo sarcásticamente el ministro a Robledo.

Por su parte, el senador citate, Jorge Robledo, señaló que la gran conclusión de ese debate es que el ministro de Hacienda debe renunciar “por haber actuado de forma corrupta”.

Para Robledo, la asesoría que dio Carrasquilla con su empresa Konfigura Capital, para permitir que los 117 municipios tomaran dichos bonos, fue ideada por el hoy ministro desde que salió de la cartera de Hacienda en 2007. “Paja, el negocio se hizo para que fuera el Estado el que le daba la plata a los bancos, el riesgo era cero. Los alcaldes ni tocaban esta plata”, sostuvo.

Incluso, el senador del Polo Democrático le preguntó durante su intervención cuál era el negocio que se estaba ideando ahora, en su nuevo paso por ese cargo, lo cual generó una fuerte controversia de comentarios de senadores de la bancada de gobierno que reclamaron respeto para el ministro. Al cierre de esta edición el debate seguía, pero sin el interés que el mismo había despertado.

 

BOGOTÁ COLPRENSA