HOY DIARIO DEL MAGDALENA
Líder en la región

«La situación actual en España en muchos aspectos es preocupante”

El escritor catalán y Premio Cervantes Eduardo Mendoza ha presentado su nueva novela ‘El Rey recibe’ y ha reconocido que «la situación actual de España en muchos aspectos es preocupante», aunque también ha precisado que no recuerda una época en la que se haya dicho que no haya problemas.

«La situación actual en España en muchos aspectos es preocupante, y que ha habido momentos más eufóricos y con más ganas de abordar los problemas también. Ahora estamos todos a punto de tirar la toalla pensando que esto no tiene arreglo o que vamos de mal en peor. Pero yo creo que esto es más una actitud que una realidad», ha comentado.

En todo caso, asegura que España ya no es diferente porque lo que está pasando aquí está pasando también en otros muchos países europeos. «No hay país de Europa que en este momento no considere que está al borde del precipicio. A veces vamos un poco adelantados, como la Guerra Civil, que pareció el ensayo general de la Segunda Guerra Mundial. Espero que esto no sea otro ensayo», ha reflexionado.

El escritor también se ha referido a la candidatura de Manuel Valls por parte de Ciudadanos para la alcaldía de Barcelona alegando que se trata «de una apuesta política» de alguien con «una gran formación».

«Es un político de proeza y con una formación mucho mayor que la mayoría de políticos que optan junto a él», ha declarado. En este sentido, ha recalcado que Valls ha sido primer ministro de Francia, algo que para él «no es poco», aunque ha advertido que «puede salir cara o cruz» y que «ya se verá».

Un relato de recuerdos

En cuanto al libro, ha precisado que se trata de «unas no memorias», un relato de recuerdos que conforman fragmentos de la vida de un personaje «que transcurre sobre el telón de fondo de su propia vida». «El personaje vive en los lugares y momentos que yo he vivido. Era una manera más divertida de escribir», ha expresado.

Y es que ‘El Rey recibe’ invita a recordar el fin de los años sesenta y parte de los setenta, una etapa que iniciaba «un proceso de apertura, literal y metafórica. A través de este contexto social, Mendoza va a contar la historia de Rufo Batalla, que comenzará en Barcelona en 1968, un joven «de plumilla» de 22 años que se parece mucho al escritor y que, como hizo él, acabó viajando a Nueva York.

Este libro constituiría la primera parte de una trilogía que Mendoza pretende terminar. Un pistoletazo de salida que se centra en «todos los pequeños pasos que se llevaron a cabo para hacer posible la transición», una transición que, según ha lamentado el autor, «ahora es criticada», pero que en su momento «fue bastante mejor de lo que se esperaba».

«Nadie pensaba que saldría tan bien, y eso se fraguó en parte por el gran trabajo de la prensa, los sindicatos, y movimientos de todo tipo», ha señalado para matizar que, por ello, ha introducido la figura de Fraga en la novela, aunque de joven «no le gustaba nada», desde una mirada más madura ha conseguido analizar que «destapó un a olla de la que salió un caldo muy nutritivo».

Y en esto ha querido ahondar también el escritor, en cómo «al llegar a cierta edad», uno se da cuenta de que ha sido testigo de acontecimientos que «en su momento parecieron trascendentales» y luego «resultaron no serlo», y también de cómo «ha vivido grandes transformaciones sociales sin advertir su importancia mientras ocurrían a su alrededor».

Evolución de la prensa 

En este sentido, ha puesto como ejemplo la prensa. «Nosotros comenzamos con la prensa haciendo sus crucigramas y demás, pero no nos dimos cuenta de que iba a influir en el desarrollo del mundo de la manera en la que lo hizo, ni de que iba a ser una fuerza política considerable», ha indicado para añadir que «la prensa tuvo su momento de gloria».

En cualquier caso, para él, en la actualidad el periodismo «ya no influye de la misma manera» y no tiene «la autoridad que tenía», debido en parte a las redes sociales y a que «ya nadie es lector de un periódico» por que «ojea muchos».

Además, ha incidido en que el libro hace hincapié en el origen de los movimientos por los derechos civiles que comenzaron en Nueva York, movimientos «transversales por la igualdad y de respeto por la diversidad». «Todo esto lo veis a toro pasado, pero es fascinante. Es todo tan interesante que no hay que perder el tiempo con la nostalgia», ha expresado.

Y es que a pesar de la mirada hacia el pasado, Mendoza asegura que «no es un libro nostálgico» y que «la nostalgia es un vicio que procura no tener». «No soy nostálgico por que soy egoísta pero no egocéntrico. Sólo me interesa lo que pasó y a las personas que conocí, pero la nostalgia es relativa», ha dicho.

Preguntado por cómo se imagina la ciudad de Barcelona en 25 años, el autor ha señalado que «no tiene ni idea» pero ha lamentado que «en estos momento se ha convertido en un parque temático», una especie de «centro turístico» que a los barceloneses «les gusta poco».

 

Madrid  Europa Press

Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia. Asumiremos que está de acuerdo con esto, pero puede optar por no participar si lo desea. Aceptar Leer más