HOY DIARIO DEL MAGDALENA
Líder en la región

La acción conjunta, clave de éxito

Estamos en un mundo diverso, hecho que por sí mismo demanda mayor solidaridad y cooperación para establecer los soportes de una nueva y remozada comunión para la acción conjunta, sin que importen los ascosos debilitadores y debilitantes de los organismos financieros, como tampoco la acción corrupta de políticos que anteponen sus propios y mezquinos intereses al bien común, olvidando que la política bien y mejor concebida es servicio, pero jamás ni nunca negocio como se le quiere ver y de hecho así opera, toda vez que en ese trasegar no interesa trasgredir la Constitución y la ley, viéndose todo con una pasividad que asombra y permitiéndonos, cual eunucos mentales, el todo vale y todo sirve.

Nadie es dueño de nadie, valiendo reaccionar ante lo mal y peor hecho, actuar de manera pensante, cuestionarnos en verdad, ir al fondo de la cuestión, pensar y repensar la realidad, encauzar nuestra propia inventiva, multiplicar los esfuerzos de entendimiento y comprensión, tender vías siempre hacia quienes ayuda reclaman, lo que requiere para llegar a buen término, un foco global que evite trabajar de manera aislada como fragmentada, siendo necesario la colaboración conjunta para administrar los recursos todos, ya que las crisis aparecen permanentemente y por lo tanto importante es el auxilio mutuo.

Interesa en esto la iniciativa, emprendimiento e inventiva de las personas, en ruta a encontrar la vía que nos lleve a escenarios de autorrealizaciones; en últimas, lo realmente dignificante. Es tomar los alientos que sean menester, no desfallecer, nunca sentirse abandonados. No tener trabajo socava la dignidad, lo que poco parece interesar a los mandatarios de hoy, razón por la que miles de personas se degradan, prefiriendo vivir en situación de vulnerabilidad y de desamparo ante la mirada ausente de una clase detentadora de poder que no acepta y por ende se resiste a proveer solidaridad y ayuda, importando el empuje colectivo, su creatividad libre, ver que el mundo cambió y por ende no dejar que avasallen los propios derechos.

Todo nos pertenece a todos por igual, lo que obliga a despejarnos de egoísmos y trabajar en justa comprensión de fraternidad y respeto; de ahí la importancia de luchar para acabar con las transgresiones a los derechos humanos, lo que demanda un mayor compromiso de todos, especialmente cuando de considerar las diferencias culturales como muros en lugar de horizontes se trata, a efecto de fomentar mayor cohesión social con legítimo afán solidario. Se trata de unirnos, caminar juntos, trabajar coordinadamente. Todos a una. Bien vale la pena.

[email protected] *Jurista

Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia. Asumiremos que está de acuerdo con esto, pero puede optar por no participar si lo desea. Aceptar Leer más