Desagravio merecido

Se llevó a cabo en Bogotá, en días pasados en las instalaciones de la Casa de España, un acto de desagravio al Doctor Rubén Darío Ceballos Mendoza, organizado por los doctores Carlos Forero y José Humberto Salazar, en el que se hicieron presente destacadas figuras de la vida política, profesional, la judicatura, la academia, la cultura, entre otros muchos, así como demás personalidades quienes dejaron como constancia que asistían al acto no sólo como un deber, sino con todo el vigor y la enorme responsabilidad de saber que representa el doctor Ceballos, una fuerza ética y moral, ser persona que en los actuales momentos de degradación que vivimos y dado su compromiso con la patria y sus gentes, es mucho todavía lo que tiene para brindarle al país desde su ser, hacer y quehacer profesional, académico y político.

Luego de la lectura de importantes mensajes de adhesiones que daban cuenta de la solidaridad tras haberse superado tamaña iniquidad, el primero en dirigir la palabra a los asistentes, además de oficiar como oferente, fue el Ex Senador y dirigente del Movimiento Político “Transformación“, doctor Ricaurte Lozada, quien en significativa pieza oratoria destacó del doctor Ceballos, sus fuertes convicciones, su amistad íntegra, su defensa de la buena política, pero sobre todo, las injusticias e infamias cometidas en su contra. Ponderó la libertad como valor y principio inalienable, al tiempo que profundizó con fundamentos manifiestos, ciertos y debidamente soportados, las críticas que se vienen haciendo al sistema penal acusatorio.

 

Manifestó, además, que no era posible bajo circunstancia alguna dejar pasar por alto lo ocurrido al doctor Ceballos, al mancillarse la trayectoria y honra de un hombre, aguerrido y luchador cual que más y adalid de causas justas, quien muchos servicios, desde las distintas posiciones en las que ha estado, ha sabido prestarle al país con honestidad, honorabilidad e intachable conducta.

Finalmente, tomo la palabra el doctor Ceballos Mendoza, quien en emotiva alocución y gran ánimo, refirió, entre otros asertos, tener claro hoy más que nunca, que una gran misión en su vida será la de seguir batallando cada día y cada vez más por una mejor sociedad y porque tengamos unos administradores de justicia mayormente ecuánimes, que no vayan nunca en contravía de la libertad, que es condición “sine qua non” de la vida, por lo que aseguró la importancia de defenderla para que nadie pueda arrogarse el derecho de constreñirla ni de amañarla a antojos y caprichos propios, auspiciados como en su caso por animadversiones gratuitas y por ende sin fundamento alguno de funcionarios y falso testimonio en la procura de beneficios punitivos, abusando de las bondades del Sistema Penal Acusatorio. Merecido sin duda y enhorabuena el desagravio y homenaje al mismo tiempo para este buen hijo de Santa Marta y el Magdalena. Lo propio aconteció en Santa Marta donde distintas personalidades de Santa Marta y el Magdalena le tributaron reconocimiento similar. [email protected]