Reportaba un accidente, bus lo atropelló y murió

Yoelgis Castañeda Mejía, de 41 años, murió en la madrugada de este sábado en una clínica de Bosconia, por las graves heridas que recibió al ser arrollado por una turbo que fue chocado por un bus en la vía que de ese municipio lleva a Valledupar. Todo ello, luego de que él reportara un accidente de tránsito ocurrido en ese mismo sector.

La muerte sorprendió de manera intempestiva a un supervisor de vigilancia de 41 años en la madrugada de este sábado, cuando en ejercicio de sus funciones, fue arrollado por un vehículo en medio de un accidente de tránsito ocurrido en la vía que de Pueblo Nuevo (Magdalena) conduce a Valledupar.

La víctima mortal de los hechos fue identificada por las autoridades como Yoelgis Castañeda Mejía, quien falleció cuando era atendido por los galenos de la Clínica Sinais Vitais del Bosconia, a causa de las graves heridas que sufrió en su cuerpo durante un siniestro ocurrido en el kilómetro 21 + 700 metros del trayecto en cuestión, en tierras del último municipio mencionado.

De acuerdo a lo informado por familiares de la víctima, pasada la medianoche de ayer salió de su casa ubicada en el corregimiento de San Roque (jurisdicción de Curumaní, Cesar) para hacer la inspección de un siniestro que había ocurrido en ese punto específico pero cuando se retiraba, otro accidente le segó la vida.

“Yo estaba durmiendo cuando me llamó el Ejército para decirme que lo había llevado al hospital. Lo que tengo entendido es que él realizaba sus labores en un sitio donde había ocurrido un accidente, estaba haciendo el reporte y cuando se fue a devolver hacia la empresa a entregar el informe, el conductor de un bus se durmió, se salió de la vía y le pegó a una turbo. Cuando esta se desvía, le pegó a mi esposo, que estaba parado a un lado de la carretera y lo dejó mal herido”, dijo su compañera sentimental, que prefirió no decir su nombre.

De inmediato, quienes estaban presentes en el lugar de los hechos dieron avisos a las autoridades y rápidamente, la víctima fue trasladada en una ambulancia hasta el centro asistencial inicialmente citado, donde pereció pese a los esfuerzos realizados por los médicos de turno para mantenerlo con vida.

Una vez confirmada su muerte, una unidad móvil de criminalística de la Policía de Tránsito y Transportes del Cesar se aproximó a la clínica para realizar la inspección técnica al cadáver, que horas más tarde fue llevado a la morgue del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses de Valledupar, para que allí le practicaran los exámenes de necropsia de rigor.

Sobre el fallecido se conoció que fue soldado profesional, trabajaba con la empresa de vigilancia Nápoles como supervisor de accidentes, era padre de dos menores de edad y residía con su familia en el barrio Simón Bolívar, de San Roque, tierra que lo vio nacer. En esa misma población será sepultado por sus seres queridos.