“Lo que ocurrió con la Unión Patriótica no está pasando”: Gobierno

El Gobierno protege a los miembros de la antigua guerrilla de las Farc para que, tras el acuerdo de paz, no les ocurra lo que a la Unión Patriótica (UP), el partido que fue casi exterminado mediante el asesinato sistemático de sus militantes, aseguró el alto consejero para el Posconflicto, Emilio Archila.

“Lo que ocurrió con la Unión Patriótica no está pasando. El presidente Duque ha sido absolutamente claro, contundente, en que nosotros debemos proteger a los excombatientes”, sentenció Archila en una entrevista desde Washington.

Consultado acerca de los asesinatos denunciados en los últimos meses, el funcionario descartó “cualquier asociación” entre las muertes de líderes sociales con lo sucedido con la UP y aclaró que en lo que respecta a los excombatientes de las Farc, hoy convertidas en un partido político, “no hay ninguna similitud”.

Para Archila, “cualquier asociación de lo que está ocurriendo con los líderes sociales” con la UP “es o resultado de una mala intención de desprestigiar al Gobierno o de una ignorancia absoluta”.

La UP es un partido de izquierda que nació en 1985 como parte de un proceso de paz iniciado un año antes por las Farc con el entonces presidente, Belisario Betancur, y que posteriormente sufrió el asesinato de unos 4.000 de sus integrantes.

El consejero para el Posconflicto admitió que el tema de los líderes sociales es unapreocupación “de todo el Gobierno”.

Según la Defensoría del Pueblo, al menos 462 líderes sociales y defensores de derechos humanos fueron asesinados en Colombia entre el 1 de enero de 2016 y el pasado 28 de febrero.

En lo que respecta a quienes dejaron las armas, Archila indicó que “en los primeros cinco meses del 2018 mataron más excombatientes que en los primeros cinco meses del 2019”.

Homicidios de excombatienes

El funcionario reveló que entre enero y mayo del pasado año contabilizaron 37 homicidios frente a los 22 del mismo periodo de 2019, mientras que las tentativas de asesinato pasaron de 5 de enero a mayo del año pasado a 6 en los mismos meses de este.

“Ojalá no fuera ninguno, pero lo que no está ocurriendo es que se esté incrementando la violencia en contra de los excombatientes”, afirmó Archila, para quien es “muy peligroso” manejar el tema de la Unión Patriótica “sin cuidado”.

En ese contexto, detalló que asesinatos de excombatientes que hayan tenido que ver con actividades políticas “ha habido tres”, y confirmó que los causantes intelectuales y materiales “están en la cárcel”.

Explicó además que ningún exguerrillero fue atacado ni asesinado durante las campañas electorales de 2018 en su país y que los informes de la ONU tampoco consignan “incidentes” en la protección alrededor de los espacios creados para la capacitación y reincorporación de excombatientes.

Por otra parte, el consejero del Gobierno para el Posconflicto, quien desde agosto del año pasado ocupa ese cargo, resaltó el consenso que existe en su país a favor de la paz.

“El país no tiene amigos y enemigos de la paz, eso no es así. Esa fue una campaña política de una de las facciones del referéndum que llevó a esa idea”, declaró al aludir a la consulta convocada por el entonces presidente Juan Manuel Santos para avalar el pacto rubricado en septiembre de 2016 con las Farc.

A juicio de Archila, “todos” en Colombia “quieren la paz”, aunque consideró que el Gobierno está enfrentado a “un tema de percepción”.

Sobre su visita a Washington, Archila destacó como una “buena noticia” que el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, hiciera este miércoles explícita ante el Congreso la “complacencia” del Gobierno del presidente Donald Trump “con los esfuerzos que ha venido haciendo Colombia tanto en la erradicación forzosa como en la sustitución voluntaria” de cultivos de drogas.

“Mostró las cifras, demostró cómo durante este año hemos hecho mucho más de lo que se venía haciendo en los años anteriores, confió en la política integral que tiene el presidente Duque de erradicación forzosa y sustituciones voluntarias”, apuntó el consejero, que consideró el gesto un “espaldarazo claro” a la convicción y la manera como están encarando el problema.

El Colombiano