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En los próximos días el presidente de la República, Iván Duque Márquez, dará a conocer a la opinión pública una reglamentación institucional que resolvería el caso de más de 24.000 niños, hijos de migrantes venezolanos, que según la Registraduría no tienen nacionalidad definida.
«Hay una definición que se ha tomado como consecuencia de una consulta interinstitucional que se está haciendo con los niños para cumplir con la responsabilidad de garantizarles los derechos a la nacionalidad», señaló el Canciller Carlos Holmes Trujillo.
Esta reglamentación se sumaría al capítulo de apátridas que está contemplada en la Ley de migrantes que recientemente radicó el Gobierno Nacional en el Congreso de la República y con la que se pretende ordenar la normatividad dispersa en relación a la atención a esta población.
En dicho capítulo se aplicaría un ajuste del marco jurídico colombiano para la prevención y reducción de este fenómeno basados en la Convención para reducir los casos de apátridas de 1961. Se proponen facilidades para la naturalización de estas personas.
Según el canciller esta iniciativa tiene como objetivo garantizar una migración segura, ordenada y regular, pese a que Colombia sigue siendo primordialmente un país emisor de migrantes. Sin embargo, dijo, que con la migración venezolana la situación ha cambiado y el país debe prepararse para enfrentar los retos.
Trujillo agregó que en materia de seguridad también se contemplan acciones para la prevención y combate de organizaciones criminales que se lucran de delitos transnacionales, como la trata de personas o el tráfico ilícito de migrantes en el que caen víctimas colombianos y extranjeros por igual.
BOGOTÁ (Colprensa)