HOY DIARIO DEL MAGDALENA
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Mirar al Pacífico

De nuevo el presidente Iván Duque estuvo de viaje por diferentes partes del mundo con el fin de gestionar proyectos que permitan mejorar las relaciones internacionales y generar negocios para los empresarios colombianos. Fue muy poco lo que el país miró a Asia durante años, pero desde hace algún tiempo se ha intentado mejorar esta situación, pues se trata de un jugador importantísimo en la economía global. Por eso el viaje a China es clave para estrechar relaciones que sirvan para que este gigante que se encuentra en guerra comercial con los Estados Unidos nos preste mayor atención.

Mirar al Pacífico ha sido un sueño desde hace mucho tiempo, al contar nuestra costa occidental con amplias posibilidades de comunicarse con esa parte del mundo, por eso la visita presidencial se ha centrado en la industria portuaria china, con el fin de modernizar nuestros puertos y desarrollar nuevos proyectos que permitan sacar mayor provecho al litoral. En la ciudad de Shangái, el mandatario colombiano recordó que el nuevo Plan Nacional de Desarrollo incluyó la posibilidad de entregar concesiones portuarias hasta por 40 años, con el fin de que se trate de un negocio atractivo para los inversionistas y esto será fundamental en el desarrollo económico del país.

El sueño de cualquier nación es poder abrir mercados en China, que es el mayor consumidor del mundo. Los cafeteros lo intentan desde hace mucho. Los productos agropecuarios nuestros han intentado llegar a esos territorios, pero aún sigue siendo muy incidental las posibilidades de vender grandes cantidades. China consumió en el 2018 126 mil millones de dólares, de los cuales Colombia apenas aportó el 0,05%. Sí se han incrementado lastransacciones de minerales, pero todavía no mucho la inversión que puede hacer ese país en el nuestro, a pesar de que en los últimos años la economía china ha ido llegando a Latinoamérica con capital en diferentes actividades.

De ahí que hoy China sea el principal jugador en el futuro de Venezuela, pues es su principal acreedor y lo que suceda allí puede afectar sus intereses. Seguramente el presidente Duque hablará con ese Gobierno de este tema, con el fin de buscar ayuda para que se dé por fin la terminación de la dictadura y se logre el gobierno de transición, que conduzca a elecciones libres. Falta ver si logra algún avance en este sentido, pues obviamente China no es una democracia.

Las críticas al presidente Duque por sus continuos viajes al exterior deben ser miradas con beneficio de inventario. Es cierto, que este tipo de viajes en ocasiones no generan ningún rédito y por ese motivo se desperdician recursos, tiempo y energía. No obstante, en los tiempos que corren, cuando el mundo se hace pequeño no se pueden perder las oportunidades de ir a los lugares en donde se están moviendo las cosas, y eso es precisamente lo que hace hoy China, un país que rápidamente va dejando atrás la pobreza que la marcó durante siglos y pretende ser un país de ingreso alto en el 2030. Por este motivo, esperamos que los resultados se traduzcan en convenios de intercambio de tecnología, en inversiones, en turismo, y en todo lo que sea de mutuo beneficio. Si la gira sale bien, al país le va bien.

*Internacionalista.

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