Atentado en Palermo sería por negocios de microtráfico

Dos menores de 6 y 5 años fueron alcanzadas por los impactos de bala, cuando jugaban en la terraza de la vivienda donde se produjo el hecho de sangre.

Un clásico ajuste de cuentas por temas de narcotráfico es el principal móvil que manejan los investigadores judiciales de la Policía Metropolitana de Santa Marta sobre el atentado sicarial registrado la tarde de este en el corregimiento de Palermo, jurisdicción de Sitionuevo en el que murió Javier Eduardo Anaya Delguercio, donde también resultaron heridas su hija y sobrina.

Así lo aseguró el comandante de la Policía Metropolitana de Santa Marta, coronel Gustavo Berdugo Garavito, “durante el desarrollo de las investigaciones, se logró identificar que una de las hipótesis tiene que ver con temas narcotráfico, esperamos que con el trabajo que se realizó con actos urgentes y las evidencias que se pudieron compilar, además de los trabajos de campo podamos esclarecer este hecho y dar con la captura de los responsables”, explicó.

Así mismo, el alto oficial agregó que la víctima registraba antecedentes judiciales, por lo que no se descarta la hipótesis de una retaliación, “esta persona tenía antecedentes judiciales por el delito de narcotráfico, lo que nos va a permitir agilizar el trabajo investigativo que se viene realizando en el corregimiento con el fin de individualizar y capturar a los pistoleros que dieron muerte a esta persona”.

EL CRIMEN

Como se informó en la edición de ayer, el hecho se produjo a las en la calle 2 con carrera 3 del barrio Palermo Viejo, al otro lado del puente Pumarejo cuando Anaya Delguercio se encontraba en las afueras de su casa acompañado de su hija y una sobrina, y fueron sorprendidos por un sicario que llegó a pie hasta el lugar y con arma de fuego en mano les disparó indiscriminadamente.

Sin mediar palabra, el pistolero descargó el proveedor de la pistola en la humanidad de su objetivo, causándole dos impactos de bala a la altura del tórax.

Durante el hecho, también resultaron heridas dos pequeñas; la hija de la víctima que recibió un disparo en el pie izquierdo, mientras que su prima uno en el pie derecho, por lo que fueron llevadas de emergencia hasta un centro asistencial de la localidad donde recibieron atención medica especializada por los galenos en turno.

Luego de cometer la acción criminal, el pistolero huyó del lugar y fue recogido por una moto conducida por su cómplice, con rumbo hacia Barranquilla. Por su parte, Anaya Delguercio, quedó tendido sobre el asfalto en medio de un charco de sangre, de donde fue auxiliado por sus familiares que lo trasladaron hasta la sala de urgencias del centro asistencial Camino Simón Bolívar de Barranquilla, donde los galenos en turno informaron que había ingresado sin signos vitales.

Una comisión del Laboratorio Móvil de Criminalística CTI de la Fiscalía, fueron los encargados de realizar los actos urgentes y el levantamiento del cadáver, el cual fue llevado hasta la morgue de Medicina Legal y Ciencias Forenses de Barranquilla donde le practicaron la necropsia de rigor.