HOY DIARIO DEL MAGDALENA
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Colombia,  cuarta en relevo 4×400

Anthony Zambrano, Alejandro Perlaza, John Solis y Diego Palomeque corren como viven. Con alegría y entusiasmo pero también con responsabilidad y entrega. Por esta razón clasificaron a la final de los 4×400 metros en la que fueron segundos del heat 1 con 3:01:06. Marca con la que hicieron récord nacional. Pero ese apenas era el inicio de lo que harían en el Mundial de Atletismo de Doha.

En la final, los colombianos consiguieron un cuarto lugar histórico por debajo de Estados Unidos, Jamaica y Bélgica y terminaron la prueba con una nueva marca, 2.59.50 que los deja muy cerca de lo que quieren lograr para los Juegos Olímpicos.

Los colombianos ya habían mostrado su potencial en los Juegos Panamericanos de Lima en donde fueron imbatibles y en donde se dieron a conocer al mundo corriendo juntos. Aunque ya lo habían hecho antes, no habían conseguido un triunfo de tanta importancia, hasta que llegó el Mundial.

Siempre que se reúnen para una competencia se nota la conexión que hay entre ellos. Bromas, risas, música y amistad. Aunque se ven muy poco, son amigos del alma y eso también se ve cuando corren. El aliento y el apoyo nunca falta cuando alguno de ellos está en la pista.

Su entrenador es Valentín Gamboa, el gran artífice de los logros del atletismo colombiano. Él los vio a cada uno y luego los juntó para crear este equipo que aún no sabe que hizo historia y que no tiene techo. En Lima, la cuarteta contó que les tocaba entrenar vía Whatsapp. Entre risas, ratificaron algo que tiene más mérito para ellos, cada uno por separado entrena lo que debe hacer en el momento de estar juntos.

Es por eso que cuando se ven son dinamita pura. Dentro y fuera de la pista. Y aunque tienen muchas cosas por mejorar saben cuáles son los aspectos que cada uno aporta para potenciar al equipo. Gamboa descubrió que Perlaza debía arrancar para tomar ventaja, seguido de Palomeque para mantener, Solis en tercer lugar con la obligación de no perder lugares y Zambrano para el remate siempre a su estilo.

Por cansancio, Zambrano no pudo rematar de la misma forma que lo hizo en la semifinal. El guajiro dejó ver el desgaste después de correr la semifinal y la final de los 400 metros.  Aún así, ratifican ser el presente y futuro del atletismo colombiano.

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