¿Cuáles son los principales retos de quien sea elegido como fiscal?

Tener fiscal antes de que acabe el año es uno de los propósitos de los magistrados de la Corte Suprema de Justicia, quienes el pasado jueves escucharon en entrevista a Clara María González, Camilo Gómez y Francisco Barbosa, luego de que el presidente Iván Duque los postulara para competir por el cargo judicial más importante del país.

La terna, que fue entregada el martes de esta semana en la sede del tribunal fue escogida y entregada por el Mandatario, quien aseguró que a la hora de elegir los nombres de los candidatos tuvo en cuenta la “idoneidad, ética y responsabilidad” de cada uno de los integrantes que, además de estar en tal lista, se encuentran ocupando altos cargos en su Gobierno. Algunos, incluso, entran en la categoría de aliado y defensor acérrimo del Jefe de Estado.

Ese es el caso, por ejemplo de Clara María González, quien hoy en día es su secretaria jurídica y quien es muy cercana al expresidente Álvaro Uribe, jefe natural del Jefe de Estado y quien avaló a Duque cuando era candidato para que aspirara a la Presidencia.

La elección del nuevo Fiscal

Aunque el presidente Duque había afirmado que no entregaría su terna para Fiscal hasta que la vacancia de magistrados en la Corte Suprema no fueran resuelta, él mismo decidió revertir esa decisión y presentar a sus candidatos.

Ahora,  la pelota está en la cancha del tribunal, que también ha tenido ligeros tropiezos a la hora de suplir las siete plazas para que Sala esté en pleno. En total se compone de 23 togados, pero hoy tiene 16 y se necesita unanimidad para esta elección.

Los juristas llevan más de seis meses tratando de escoger a sus nuevos compañeros. Según trascendió, si bien hubo quórum para avanzar en eso, por discrepancias al interior de la Sala los magistrados no lograron tener completa la corporación para recibir la terna.

Y aunque Duque ya avanzó en formar la terna, no contó con que la elección se convertiría en un dolor de cabeza para los magistrados.

Y es que dejó a los magistrados en una carrera contrareloj. La vacancia judicial empieza el próximo 19 de diciembre, lo que obliga a los 16 juristas a escoger a sus compañeros de forma rápida para avanzar en la elección del nuevo Fiscal. Una Sala Extraordinaria citada el próximo martes, y debe ser en ese encuentro que se suplan las vacantes, porque el miércoles se espera que deliberen en pleno para elegir al reemplazo de Néstor Humberto Martínez, quien renunció a su cargo en mayo del 2019.

En cuanto a los ternados, los magistrados escucharon de viva voz su perfil profesional y las aspiraciones para llegar al búnker. En el primer encuentro y para tener argumentos a la hora de elegir fue necesario que los juristas realizarán seis preguntas a cada uno, que junto con su curriculum, los llevará a decidir quién será la nueva cabeza del ente acusador.

 

Los retos

Las preocupaciones de los magistrados en cuanto a cuál será el actuar de los ternados en caso de llegar al búnker se evidenciaron en sus entrevistas a los aspirantes: al parecer les interesan los delitos ambientales, la corrupción, las relaciones con la Jurisdicción Especial para la Paz y confiabilidad de los ciudadanos en el órgano acusador.

Sobre la corrupción, quizás uno de los problemas más importantes en el país, los magistrados se refirieron al caso más sonado en la historia reciente: Odebrecht. En este punto, los ternados coincidieron en que se debe seguir con las investigaciones para identificar a los responsables de ello, incluso señalaron que si era preciso abrir nuevas acciones, lo harían.

Los tres coincidieron en que la corrupción es uno de sus más grandes retos a la hora de dirigir el búnker. El concepto que expuso cada uno de seguir las líneas de investigación que ya existen no es descabellado, a juicio del exfiscal general Guillermo Mendoza Diago, quien se mostró de acuerdo con los candidatos en que se deben fortalecer los lineamientos que ya existen en el ente acusador para atacar ese flagelo.

Para el exjefe del búnker, el trabajo que ha hecho la Fiscalía en razón a la corrupción “va por buen camino” y se deben generar acciones tendientes a robustecer las iniciativas existentes, dado que el delito “viene en aumento desde hace varios años”.

Sin embargo, Mendoza Diago señaló que es necesario que, en esta época, la Fiscalía se acerque más a la ciudadanía y genere lazos de confianza. Añadió que esto lo logra con soluciones reales y eficaces de los problemas delincuenciales que ha azotado la convivencia en el país.

Guillermo Mendoza también argumentó que otro de los grandes retos del nuevo Fiscal es la cooperación con la Jurisdicción Especial para la Paz, situación que también fue una preocupación para los magistrados en el primer cara a cara.

Los ternados, por su parte, coincidieron también en que su relación con el tribunal de paz sería “armónica”, pero más allá de eso, el también exfiscal Mario Iguarán argumentó que debe haber fortalecimiento de relaciones y cooperación entre ambas jurisdicciones. Esto, teniendo en cuenta que la Fiscalía, en su momento, adelantó investigaciones a los exmiembros de las Farc.

Bajo ese entendido, lo que expuso el exjefe del búnker es que una decisión de que debería tomar el nuevo Fiscal es que la información que reposa en los despachos de los fiscales sea enviada a la JEP con el fin de que culmine la etapa de posconflicto con verdad y reparación por parte de la justicia transicional.

Iguarán, por otro lado, añadió que otro gran reto es ajustar el sistema penal acusatorio. Expuso que las estadísticas de acusaciones y sentencias demuestran la decadencia del sistema. Añadió que es necesario robustecer la policía judicial con el fin de que cada expediente que presentan ante un juez culmine con éxito.

Postura que fue expuesta por Clara María González en la entrevista a los magistrados. La actual secretaria Jurídica de Presidencia, señaló que es importante que los fiscales lleguen ante los jueces con pruebas verídicas y no con pruebas testimoniales que, finalmente resultan arrojando en algunos casos la prescripción de los procesos.

De acuerdo con la única mujer de la terna, durante toda su estadía en el búnker, si llega a ser elegida, profesará total independencia de los sectores políticos, acción que Mendoza Diago destacó como una característica obligada de los jefes del búnker.

“El hecho de que sea ternado por el Presidente no quiere decir que eso tenga alguna relación con las actuaciones en la Fiscalía”, argumentó Mendoza y añadió que es necesario tener en cuenta que todos los candidatos a fiscal, por orden Constitucional, son elegidos por el jefe de Estado, “y el Presidente escoge a las personas que él considera serán responsables en ese cargo», precisó.

En razón a esto, Mario Iguarán señaló que “se ha demostrado que los fiscales, a pesar de ser ternados por los presidentes de turno, una vez llegan a la Fiscalía se separan de alguna relación personal cuando se llega allá y la única dependencia que se genera es con la ley”.

Si bien, los retos el nuevo Fiscal serán atacar la delincuencia, atacar los delitos ambientales, generar confianza en la ciudadanía, además de robustecer el esquema investigativo para que los procesos judiciales culminen en condenas, los exfiscales coincidieron en que se debe robustecer los elementos existentes con los que cuenta el órgano acusador.

 

Lo jurídico

En materia jurídica, como bien lo expresaron los magistrados, que tienen la última palabra en escoger al nuevo fiscal, se debe pensar en las investigaciones de Odebrecht, las denominadas ‘Chuzadas’, el esclarecimiento de los homicidios de líderes sociales y excombatientes de las Farc, la corrupción al interior de las entidades del Estado, así como la extinción de dominio sobre los bienes del grupo guerrillero desmovilizado.

Este último, es una potestad que le otorgó la Corte Constitucional al ente acusador tras la puja que se registró en el mismo y la JEP.