Dos hechos violentos en localidades cercanas a Corinto y Toribío

La violencia en el norte del Cauca no da tregua. A cuatro días de este nuevo año, ya van cinco homicidios en los municipios de Toribío y Corinto, todos causados con arma de fuego y acaecidos en su mayoría en la zona rural de ambas localidades.

Anoche, en el barrio La Colombiana de Corinto fue ultimado con arma de fuego un ayudante de construcción, identificado como Jhon Edinson Chate Campo, de 33 años de edad y conocido en este poblado como El Indio.

Ya en la tarde del sábado, y en diferentes puntos, fueron encontrados cuatros cadáveres por campesinos e indígenas de esta zona del departamento.

En relación con los macabros hallazgos, el primero de ellos sucedió en el sector de La Balastrera o kilómetro dos de la vía que comunica El Palo, Caloto con Toribío.

En dicho punto fueron encontrados los cuerpos sin vida de dos personas afrodescendientes, ambos presentaban disparos en la cabeza, y al lado de ellos,  dejaron sus pertenencias, como billeteras y teléfonos celulares.

“Se está a la espera que la Fiscalía establezca la identidades y los sitios de origen de estas personas, cuyas edades oscilan entre los 30 y los 35 años de edad”, indicaron pobladores de El Palo.

Luego, y desde el sector de Miravalle, Corinto, fueron encontrados otros dos cadáveres por parte de campesinos que se movilizaban por este sector rural.

“La gente llamó a la Policía para decirle que habían asesinados a dos jóvenes en este punto, que es como un kilómetro del casco urbano, como la fuerza pública no puede llegar a estos lugares, entonces la comunidad ayudó a trasladar los cuerpos sin vida a la morgue del municipio”, dijo un líder campesino corinteño.

Luego, en las diligencias judiciales, se estableció que una de las víctimas respondía al nombre de Jhonatan Salcedo Cermeño, de 20 años de edad y residente del municipio de Santander de Quilichao.

“El otro muerto es un adolescente de 16 años de edad. Ya sobre cómo fueron los hechos, la comunidad indicó que unos sujetos los condujeron a este punto rural para después asesinarlos”, agregó el líder campesino.

A pesar de que la información de estos hechos violentos fue aportada a tiempo por la comunidad, la Policía o el Ejército no se han pronunciado frente al tema, más cuando en esta área del departamento hay alta presencia de fuerza pública.

POPAYÁN, (Colprensa).