“No quiero inyectarme insulina”

Por
Dr. WILMAN
ESCORCIA SIERRA
MD Internista*

Quizás muchos lectores de esta columna pensarán que este título no les interesa por no ser diabéticos pero algún familiar, amigo, vecino, o hasta conocido lo es y puede salvarle la vida o evitarles complicaciones serias de salud.

La insulina por todos es conocida como una droga producida en el páncreas y que sirve para los diabéticos con el fin de bajarles los niveles del azúcar en la sangre, sin embargo en nuestra consulta diaria nos enfrentamos a una serie de mitos y tabúes que tienen los pacientes acerca de su uso y no solo en los estratos socioeconómicos bajos y en obreros como se pensaba anteriormente, sino también esto ocurre en las personas de alto nivel intelectual y económico.

Que la insulina nos deja ciegos, que la insulina los sube de peso, que quien la usa se va a morir, que le daña los riñones, que les limita la vida , que mató al vecino que estaba sano cuando se la puso, incluso  que le produce impotencia y ¡lo abandonará su pareja! ¡Pues mentira! la insulina es una droga ¡Salvadora y Milagrosa!

Fue descubierta en 1921 y desde ahí lo que le ha representado al diabético es calidad y prolongación de la vida,  antes de la insulina los pacientes ¡morían en semanas! existe un tipo 1 de diabetes especialmente en jóvenes quienes no pueden vivir sin usarla y otra tipo 2, la más frecuente, que al principio no la requieren pero cuando se agota la producción en el páncreas la ¡insulina es su salvación!

La insulina no deja ciego, la diabetes no tratada sí; la insulina no produce insuficiencia renal, la diabetes sí, la insulina no produce impotencia la diabetes sí, para más defensa de la insulina ahora viene en plumeros con agujas ultra finas que se pueden llevar en el bolsillo y que se utilizan una sola vez y que prácticamente ni se sienten.

Existen varios tipo dependiendo de su acción (ultrarrápidas, rápidas, de acción intermedia, lenta y ultra lenta)  que se administran una vez y permanecen en el organismo hasta tres días.

La insulina es la salvación para las embarazadas diabéticas o las que los niveles de azúcar se les suben durante la gestación. La insulina no afecta al feto.

Si es verdad que la insulina  produce hipoglicemia (baja de azúcar) cuando es  mal dosificada por personas no capacitadas, pero para eso están los médicos que con una adecuada dosis la evitan y además los plumeros vienen con dosis exactas para que el paciente no presente complicaciones.

Para más defensa de la maravillosa insulina se encuentran en estudio las insulinas nasales y en tabletas para confirmar que fue es y será una droga milagrosa y salvadora.

La insulina no es el culpable de los males del diabético es la solucion y cuando se formula por parte de un médico certificado en el momento que lo considere oportuno prolongará la calidad de vida de la ya sufrida diabetes y no necesariamente deberá usarla de por vida puesto si el paciente corrige sus malos hábitos ¡se puede retirar y continuar con medicación oral!

Insisto ¡la diabetes es un monstruo oculto pero la insulina es su domador!, sí se la formulan úsela.

Gracias hasta la próxima semana.* Dr. Wilman Escorcia Sierra, médico Internista y docente de la Universidad del Magdalena.