En El Catatumbo no quieren “pañitos de agua tibia”

El secretario de gobierno de Norte de Santander, Juan Felipe Corzo Álvarez, quien está de gobernador encargado, acompañado de ocho titulares del despacho instaló el Puesto de Mando Unificado en el salón de Audiencias de la Asociación de Municipios, con el fin de atender a las víctimas de la violencia de la provincia de Ocaña y zona del Catatumbo.

Corzo trazó algunas tareas para mitigar la situación que atraviesa el departamento con la alteración del orden público, por el paro armado por parte de los grupos al margen de la ley.

“Se solicitó al Gobierno Nacional la disposición de subsidios a los productores de la región que con ocasión de la restricción de la movilidad por alteración del orden público han tenido pérdidas en sus cultivos y la comercialización”, indicó Corzo Álvarez.

En segundo lugar, ordenó activar la ruta de atención a las víctimas por parte de los municipios.

“La Gobernación y la Unidad de Víctimas asistirán con apoyo complementario, articular y coordinar esfuerzos institucionales y sociales para crear un canal humanitario para la entrega de ayudas a las comunidades afectadas en cada uno de los territorios. Activar planes de contingencia municipales, de la misma manera departamental que permita dar respuesta a las emergencias humanitarias ocasionadas en el marco del conflicto armado que se está presentando”, reitera el mandatario.

Además, se promoverá, con el apoyo de las Agencias de Cooperación Internacional, el censo de la población en condición de confinamiento y desplazamiento para mejorar las condiciones de vida.

Juan Felipe Corzo exigió al Eln y Epl el respeto de los derechos humanos y el derecho internacional humanitario, a los civiles y bienes protegidos como las escuelas, vías de comunicación, zonas de cultivos, centros de salud y la misión médica en general.

También al desarrollo de actividades humanitarias en las zonas afectadas. “Estamos pendientes de cualquier alteración del orden público en cualquier municipio de el Catatumbo, para tener una reacción y toma de decisiones inmediatas”, agregó.

Manifestó que las Fuerzas Militares están en máxima alerta para evitar actos terroristas que afecte a la población civil.

Acciones cortas ante la magnitud del problema

Líderes sociales del Catatumbo indicaron que no quieren “pañitos de agua tibia”. Para ellos, las acciones tomadas quedan cortas ante la magnitud del conflicto social presentado en la región durante muchos años.

El gobernador Juan Felipe Corzo afirmó que ha sido una problemática histórica, convulsionada por esas manifestaciones de paro armado que hacen los grupos ilegales.

“Nosotros y la Fuerza Pública cumplimos y llevamos a cabo lo que nos corresponde en la misión. El compromiso es desarrollar las tareas de la mejor manera, prueba de ello, es venir y afrontar esta situación en cabeza propia y los secretarios del despacho”, añadió.

“Es un esfuerzo muy grande que debemos hacer mancomunadamente, no debemos descargar toda la responsabilidad a la Gobernación, a las alcaldías, a la Fuerza Pública. La lucha contra esos grupos armados ilegales y la mejora del orden público es un trabajo de todos. La población civil nos puede ayudar a dar con el paradero de las personas que perpetúan estos actos terroristas, informando cualquier anomalía que vean a lo largo y ancho de todo el territorio”, recalcó.

Citó el caso de la desactivación del carro bomba en la vía hacia el aeropuerto de Aguas Claras de Ocaña donde gracias a una fuente humana se alertó a las autoridades y se evitó una tragedia mayor.

“Trabajemos en equipo, mancomunadamente, que estemos en contacto permanente con la fuerza pública, con la institucionalidad, las alcaldías y la gobernación para poder prevenir cualquier acto delictivo.

COLPRENSA