Mató a su mujer en forma accidental

Luz Dary Sánchez Amaya, ama de casa quien murió a causa de las heridas ocasionada por el arma de fuego disparada accidentalmente por su marido.

 

Según las declaraciones del obrero el arma se le accionó de manera accidental cuando le hacía mantenimiento.

  

Una verdadera tragedia viven los familiares de un ama de casa residentes en jurisdicción del municipio Zona Bananera en el departamento del Magdalena luego que esta perdiera la vida a causa de las heridas ocasionadas por un tiro de escopeta, la cual al parecer se le accionó de manera accidental a su esposo cuando la limpiaba.

La víctima fue identificada por las autoridades como Luz Dary Sánchez Amaya, de 24 años, mientras que su compañero sentimental fue reportado como Yesid Fernando Santos Bautista, de 27 años, oriundo del municipio de San Gil en Santander, quien se desempeña como celador en la finca ubica en el sector Los Cocos, parte alta del corregimiento de Tucurinca, estribaciones de la Sierra Nevada, en donde se produjo el desenlace fatal.

Informaciones suministradas por el responsable a las autoridades señalan que él se hallaba limpiando el arma y que al terminar decidió cargarla puesto que era la que utilizaba para cuidar los predios.

Señaló además que cuando trató de levantarse de la silla en la que se hallaba accionó accidentalmente el gatillo provocándole las heridas en el abdomen a su mujer que la dejó mal herida. 

 

Fue auxiliada y llevada inicialmente hasta la sala de urgencias del hospital Luis Santiaga Márquez del municipio de Aracataca en donde fue estabilizada pero debido a su delicado estado de salud fue remitida hasta el centro asistencial San Rafael de Fundación en donde pese a los esfuerzos de los médicos que la asistieron a las pocas horas dejó de existir.

Hasta el centro en salud llegó el personal de la Unidad Criminalística del Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía adscrita a la ‘Esquina del Progreso’ quienes fueron los encargados de llevar a cabo la diligencia de inspección técnica al cadáver que seguidamente fue llevado hasta la morgue de esa localidad magdalenense.