Mañana, lanzamiento del libro ‘La Mansión de los Recuerdos’

‘La mansión de los recuerdos’ es el título del nuevo libro del doctor Alberto Rodríguez Akle, magistrado del Tribunal Superior de Santa Marta,  en el que plasma todos los acontecimientos de su vida, sin ánimo de ser solo un texto biográfico, sino una historia humana./ LUIS PARRA

Haciendo caso a la célebre frase de Jorge Luis Borges que dice “Somos nuestra memoria y un quimérico museo de formas inconstantes…”, el honorable magistrado Alberto Rodríguez Akle plasma la historia de su vida con el arte de las palabras en el nuevo libro titulado ‘La Mansión de los Recuerdos’; una obra que se convierte en esa gran casa donde reposan las remembranzas de 61 años de existencia.

La primera edición de este libro fue publicada el pasado mes de agosto, pero será mañana miércoles 20 de diciembre, a las 6:30 de la tarde, el lanzamiento oficial para el público, en un sencillo evento que se llevará a cabo en la sede de la Fundación Cultural ‘Puccini’, ubicada en la calle 17 No. 7-10, con invitación cordial del Obispo de la Diócesis de Santa Marta, monseñor Luis Adriano Piedrahita Sandoval.

Son 11 capítulos en los que el jurista hace un recorrido por todos los momentos de su vida, de la mano del humanista escritor e historiador William Hernández Ospino, quien lo guió para “tejer estas memorias”, que inician con la llegada de su abuelo materno desde Palestina a tierras colombianas, lo que marca un aspecto cultural importante a lo largo de la obra.

“No es solo un texto biográfico; tiene muchos ingredientes más que nos hacen reflexionar, es un libro humano con aspectos filosóficos, éticos, poéticos, históricos y variadas metáforas, pero además nos describe una región, una cultura, una sociedad. Siempre entendí que escribir la historia del ser humano es un ejercicio que debería ser impuesto en la educación de los pueblos, somos lo que hemos vivido y cada ser humano es un capítulo de existencia logrado o inconcluso”, expresó el magistrado Alberto Rodríguez a HOY DIARIO DEL MAGDALENA.

En ‘La Mansión de Los Recuerdos’ los lectores podrán conocer de cerca y con detalle como la cultura árabe influyó de manera tajante en el encuentro de sus padres Evelio Rodríguez y Ligia Akle, quienes vivieron su idilio lejos de esas arraigadas tradiciones; su infancia y adolescencia, el paso por la universidad en la carrera de Derecho, el asesinato de su padre a manos de la guerrilla y otras situaciones que rodean la vida de este personaje, considerado orgullo del departamento de Magdalena, por su labor.

Además, este libro se convierte en una especie de manual para el profesional de la Jurisprudencia, pues dice que “hay cosas que deben quedar escritas para las futuras generaciones” y por eso, se atreve a dar consejos a los nuevos funcionarios, empleados y profesionales que ingresan a la rama judicial y empiezan a ejercer esta profesión.

El magistrado Alberto Rodríguez Akle considera que este libro es la muestra de que el ser humano encarna las victorias de incontables batallas y que eso debe ser digno de ser contado. / LUIS PARRA

 

“Llevo más de 30 años de servicio a la rama judicial, pero siempre me llamó la atención la historia de mis padres; inicialmente quise hacer un texto pero simplemente a nivel de la familia, para dejárselo a mis hijos y nietos, pero la idea se fue ampliando y algunos amigos que leían algunos párrafos me decían que lo extendiera más”.

La tragedia marcó su vida no solo por lo que le tocó vivir desde pequeño, sino porque ya convertido en profesional y con una familia conformada por su esposa Gloria Mazenett y sus cuatro hijos, vivió en carne propia el drama del secuestro que trajo consigo el fallecimiento de su hijo mayor, Alberto Javier, en junio del año 2002.

“Es un proceso que no ha sido fácil, la pérdida de un hijo no se supera nunca; el tiempo apacigua las cosas, pero hay subsiste y permanece. Para mí, el secuestro no fue tanto, yo hubiese superado el secuestro en poco tiempo; no digo que no sea un atentado contra el ser humano, pero emocionalmente no se olvida pero sí se supera más rápido. No fue fácil compaginar los dos aspectos, porque su ocurrencia fue conjunta y allí explico con un capítulo especial, paso a paso y en buenos términos cómo sucedieron los hechos, en cautiverio y lo que vino después”, explicó.

Precisamente, este abogado nacido en el municipio de Plato, Magdalena, y al que le dedica un especial espacio en el libro, se considera un aparte de la existencia con algunos pendientes y que aún debe seguir librando duras batallas; las mismas que han marcado su vida y que han implicados pérdidas, pero a la vez, lo han llenado de fortaleza para seguir el curso del camino.

“Todavía quedan muchas cosas por hacer y ese es mi propósito, que el ser humano debe perseverar y la historia de cada uno de nosotros no debe quedar enterrada en las arenas del desierto, sino que debemos exponerlo; cada quien tiene muchas cosas que decir y de eso vive la humanidad, así es como se conoce la historia de la humanidad. Si me detengo un instante en ese estudio de retrotraer ese pasado, voy a encontrar muchas cosas que están todavía en el tintero”, expresó.