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Debe primar la vida por encima de las causas políticas afirman las autoridades religiosas.
Desde la Conferencia Episcopal, CEC, la iglesia católica hizo un llamado a los organizadores del paro para suspender las jornadas de movilización previstas para mañana 28 de abril.
A través de un comunicado, la Conferencia Episcopal de Colombia, como representante de la iglesia católica en el país elevó una voz que hace eco a las solicitudes que ya han expresado otros sectores de la sociedad, para que los sindicatos, las organizadores y convocantes del paro nacional, previsto para el 28 de abril, suspendan las jornadas de movilizaciones.
“Prima el derecho fundamental a la vida y es necesario anteponer el deber de cuidar la salud de todos”, indican en su misiva los religiosos del país, y está firmada, entre otros, por monseñor Óscar Urbina, Arzobispo de Villavicencio y presidente de la CEC; y monseñor Ricardo Tobón, Arzobispo de Medellín y vicepresidente del episcopado.