Neymar, al banco de acusados tras su millonaria renovación

El PSG llegaba a su partido contra el Rennes a cuatro puntos del Lille, líder de la Ligue 1. Un traspié suponía decir prácticamente adiós al título y, en ausencia de Mbappé, todavía lesionado, todos los focos estaban posados en Neymar. Si tenemos en cuenta que horas antes del encuentro se había confirmado la renovación del crack brasileño hasta 2025, la intensidad de las luces era aún mayor. Y el ex del Barça, a pesar de haber abierto el choque con un tanto de penalti, decepcionó y no pudo evitar el empate definitivo (1-1). No fue su día.

Los principales diarios franceses se hacen de su partido y destacan la espesura del mismo, en una línea similar a la trazada en la eliminatoria ante el Manchester City que les dejó fuera de la final de la Champions. L’Équipe señala que «deambuló entre líneas sin dinamismo», dejando incluso que «Ander se hiciera cargo y tuviera un mayor impacto» ofensivo en el choque. «Neymar se divirtió solo, olvidándose de centrar a sus compañeros (…). Su gol, el octavo en dieciséis partidos de Ligue 1, no esconde su producción, claramente insuficiente», completan.

Este medio, además, culpa al ’10’ de estar «menos preocupado que en la Champions League (…), como si el título de campeón de Francia no le motivara». Los números de Ney en competición doméstica son de 8 tantos y 5 asistencias en 16 partidos, participando en un gol cada 95 minutos. Mientras que en la máxima competición continental ha acumulado 6 y 3 en 9 encuentros, teniendo incidencia directa en un gol cada 83 minutos. Números superiores, a pesar del mayor nivel de los rivales, que quizá sustentan la afirmación anterior.