Noticias de Santa Marta, el Magdalena, y el mundo!
Lideresa denunció a la UNP por no protegerla
Mary Esther Morales Álvarez, es la mujer que fue abandonada a su suerte por parte de la Unidad Nacional de Protección y que actualmente teme por su vida porque no cuenta con un esquema de seguridad que salvaguarde su integridad.
Temerosa y preocupada se encuentra la lideresa Mary Esther Morales Álvarez, luego de denunciar públicamente que la Unidad de Protección Personal dejó de prestarle la seguridad que ella requiere para que su vida no corra peligro.
La mujer, residente en el municipio de Puebloviejo aseguró que el pasado 18 de agosto cuando estaba reunida con víctimas del conflicto armado, fue abandonada por su esquema de seguridad siendo puesta en el blanco de los criminales que quieren acabar con su existencia.
La líder afrodescendiente responsabilizó directamente al presidente Iván Duque Márquez al igual que al director de ese esquema de protección personal si algo le llegase a pasar.
“Señaló al mandatario nacional y al director de la UNP Alfonso Campo si algo me ocurre porque en ellos son en los que recae la responsabilidad de mi integridad. Ahora vivo intranquila porque no puedo asistir a las reuniones al no contar con los hombres que cuidaban, esto debe tener una pronta solución ya que mi vida desde hace 20 años ha corrido peligro”, indicó Morales Álvarez.
De igual forma, manifestó que en ese tiempo cinco de sus hermanos han sido asesinados por grupos criminales y al margen de la ley únicamente por la defensa de los derechos humanos.
“La Unidad de Protección me asignó unas medias de protección las cuales no responden a los criterios porque en repetidas ocasiones por la falta de este servicio de esta institución, he sido víctima de graves violaciones de los derechos humanos me han asesinado cinco hermanos. Además, he sufrido tres desplazamientos forzados siendo el Estado Colombiano incompetente porque no ha hecho nada para protegerme”, sostuvo la líder.
Mary Esther Morales Álvarez espera que esta denuncia surta efecto y pueda obtener nuevamente el derecho constitucional de protección que ponga a salvo su vida.
