Liberado en el río Sevilla ejemplar del caimán aguja

La Corporación Autónoma Regional del Magdalena, Corpamag, asiste a la Gobernación del Magdalena en el seguimiento al comportamiento de un Caimán de Aguja que en las últimas horas fue liberado en la desembocadura del río Sevilla, en la Ciénaga Grande de Santa Marta.

 

Al reptil de 1.80 metros le fue colocado un transmisor que permitirá conocer su ubicación y comportamiento diario en la Ciénaga Grande de Santa Marta.

 

La Corporación Autónoma Regional del Magdalena, Corpamag, asiste a la Gobernación del Magdalena en el seguimiento a un Caimán Aguja que se encontraba en proceso de rehabilitación en el Centro de Atención a Fauna Silvestre, CAF, de la Corporación y que en las últimas horas fue liberado en la desembocadura del río Sevilla, en la Ciénaga Grande de Santa Marta.

Al caimán de 1.80 metros, le fue colocado un transmisor que permitirá conocer su ubicación y comportamiento diario en el complejo lagunar, en lo que constituye el primer experimento que se realiza en Colombia en materia de seguimiento a este tipo de animal, con el fin de garantizar su preservación. En el seguimiento participan la fundación Fuparcis, la Gobernación del Magdalena y Corpamag.

Según explicó Gustavo Manjarrez, director de la Fundación Fuparcis, “al animal le fue colocado un transmisor que manda una señal que va haciendo repeticiones en cuatro puntos de contacto diariamente, lo que permitirá entender el comportamiento y la dinámica del animal dentro del complejo lagunar y facilitar así la toma de decisiones en torno a la biodiversidad del ecosistema estuarino”.

El animal estuvo cuatro meses en el Centro de Atención a la Fauna Silvestre de Corpamag, hasta que alcanzara la talla y el tamaño adecuado para colocarle el transmisor. Walberto Naranjo, coordinador del CAF, recomendó a la comunidad, “no acercarse al caimán porque se trata de un animal territorial que suele ser agresivo cuando es muy grande o cuando la hembra se encuentra en celo y las personas ingresan a su territorio”

“Normalmente este tipo de caimanes no atacan al ser humano porque es una presa muy grande para su tamaño, por eso lo ideal ya sea por precaución es observarlo desde lejos, pues ellos no se meten con nadie ya que su alimentación se basa en peces, pequeños anfibios, lo cual indica que para el hombre no representa ningún peligro”, dijo Naranjo.

El proceso de monitoreo del animal está a cargo de Fuparcis y la Gobernación del Magdalena, a través del programa de Humedales a cargo de la bióloga Nidia Farfán, quien dijo que “Desde hace varios años se ha venido recopilando información sobre la especie, pero existen aún interrogantes por resolver en torno al patrón de movimiento de esta”

La liberación del caimán se hizo en la desembocadura del río porque se trata de un área propicia con presencia de babilla, por lo que durante un lapso de 12 meses se procederá a su monitoreo con el fin de establecer cómo se comporta, si entra o sale de la Ciénaga.

De los resultados de esta experiencia se procederá a replicar el monitoreo en otras zonas del departamento como en la desembocadura del río Piedras.

Cabe destacar que Corpamag se encuentra actualmente, realizando una caracterización sobre el Caimán Aguja con el fin de elaborar el Plan de Manejo para su protección y conservación.