Más samarios marcharon contra reformas de Petro

La caminata, bien organizada, los participantes demostraron ser tolerantes, respetuosos de quienes piensan distinto y bajo una sola premisa “por el bien de Colombia”.  

POR 
EDGAR 
TATIS GUERRA 

Muchos samarios e inclusive, turistas, se dieron cita ayer en el emblemático Camellón de la Bahía exactamente en el monumento de Don Rodrigo de Bastidas para participar en la marcha pacífica contra las reformas del presidente Gustavo Petro Urrego.

El intenso sol de las 9:30 de la mañana no fue impedimento para que varias personas de todas las edades, los veteranos del Ejército, académicos, profesionales de diferentes áreas y ciudadanía en general llegara al sitio de encuentro e iniciar el recorrido por las principales avenidas de la ciudad.

Los promotores de la marcha pacífica esperaron la llegada de una delegación de trabajadores del sector minero quienes se unieron a la protesta para rechazar la reforma tributaria que pretende imponer más impuestos al carbón, crear más ministerios, aumentar el costo en los combustibles y eliminar las EPS.

Cuando promediaba las 10:10 de la mañana los asistentes entonaron el Himno Nacional enarbolando la bandera de Colombia y seguidamente arrancó la caminata por toda la Avenida del Fundador o carrera primera. Había un verdadero ‘río humano’ en donde algunas personas portaban sombrillas con los colores amarillo, azul y rojo, mientras otros lucían el Tricolor Patrio en sus mejillas.

Durante el recorrido se escucharon distintas consignas como “No a la reforma tributaria, no a la reforma electoral, no a la reforma pensional, no al cambio del sistema de salud”, “Que viva Colombia”, “Sí al desarrollo, sí al petróleo, sí a la minería, sí al respeto de la propiedad privada”.

La marcha siguió por la Avenida Santa Rita o calle 22 haciendo una parada frente al comando de la Policía en donde se gritaron consignas de apoyo y respaldo a las Fuerzas Militares y a la Policía Nacional.

Un vocero de los veteranos del Ejército Nacional gritaba “Abajo las guacamayas” explicando que el presidente Petro está pintando de colores los helicópteros para burlarse de los héroes de la Patria. Justo al frente de las instalaciones del Comando policial se oyeron voces de apoyo a la institución: “Arriba la Policía Nacional, viva Colombia, viva la institucionalidad en Colombia”, repetían los participantes.

En ese sitio hubo un aplauso al unísono para exaltar a los coroneles y oficiales de la Policía Nacional y a los uniformados que acompañaron la marcha pacífica.

La protesta de ayer tuvo una mayor participación ciudadana en una demostración de que sí es posible expresar la inconformidad contra las reformas planteadas por el Gobierno sin recurrir a la violencia ni al vandalismo. Fue una caminata bien organizada en donde los participantes demostraron ser tolerantes, respetuosos de quienes piensan distinto y bajo una sola premisa “por el bien de Colombia”.

En la esquina de la Carrera 4 con calle 22 se escuchó una gran algarabía, sonaron las cornetas y pitos mientras se ingresaba a la Avenida Campo Serrano o carrera 5. En este importante corredor comercial se les invitó a sumarse a la marcha con gritos como “Abajo a la reforma tributaria, no al aumento del SOAT, no a la invasión de la propiedad privada, no más impuesto a la gasolina, no al cierre de las EPS… Viva Colombia”.

Con el mismo entusiasmo con el que los participantes iniciaron la protesta así finalizaron en la emblemática plaza de La Catedral en donde llegó el padre Isidro de Jesús Castro Duque hizo una oración por Colombia. “Escucha oh, Señor nuestras súplicas, nuestros idiomas se confunden como antaño en la torre de Babel, somos hijos de un mismo Padre que tú nos revelaste y no sabemos ser hermanos. El odio siembra más miedo y más muerte. Danos la paz que promete tu evangelio aquella en que el mundo no puede dar, enséñanos a construirla como fruto de la verdad y de la justicia. Escucha las súplicas y envíanos tu Espíritu Santo para reconciliar en una gran familia los corazones y los pueblos, especialmente el pueblo colombiano, venga a nosotros el reino de tu amor y confírmanos en la certeza de que Tú estás con nosotros hasta el fin de los tiempos. Amén”.

Al hacer un balance de la marcha, Leonor Gómez, empresaria del sector turístico de Santa Marta, dijo que cada vez son más las personas que rechazan la reforma tributaria porque atropella a todos los colombianos.

“Santa Marta demostró que somos más, que podemos salir a expresarnos sin agresiones. Con esta marcha quisimos enviar un mensaje al Gobierno Nacional y a los congresistas que el pueblo piensa y está consciente por eso no a las reformas arbitrarias”, enfatizó.

Finalmente argumentó que lo más significativo de la marcha es la unidad de cientos de ciudadanos cuyo único interés es salvar a Colombia de las reformas pre dictatoriales que nos pueden conducir a un abismo.