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Dimayor se lava las manos, no hay sanción para Tolima y accede a repetir el partido

De manera ´olímpica´ y violando sus propios estatutos y reglamentos disciplinarios, la Dimayor olvidó por completo lo ocurrido el domingo en el estadio ´Manuel Murillo Toro´ de Ibagué, y ordenó sin sanciones ni nada, que el partido entre Tolima y Millonarios se juegue el 28 de febrero. 

Pese a reconocer lo consignado en el informe del árbitro Wilman Roldan quien dijo que el partido se suspendió por falta de garantías de seguridad tras ingresar al terreno de juego un aficionado del Tolima y agredió físicamente a un jugador de Millonarios, la Dimayor olvida ese episodio y decide repetir el partido sin sancionar ni a la cancha, ni al Deportes Tolima, ni a Millonarios. 

Por hechos iguales el Dimayor sancionó con severidad al Unión Magdalena, cerró el estadio por 10 fechas y le quitó los puntos frente a Bucaramanga y Junior. 

 Las autoridades del fútbol colombiano se reunieron para discutir lo sucedido y analizar el informe arbitral presentado por el árbitro Wílmar Roldán.  

El domingo, el partido no pudo iniciar porque un aficionado del Tolima agredió al jugador de Millonarios, quien a su vez respondió, por lo que fue expulsado.  

Los jugadores del equipo azul se negaron a disputar el juego, en solidaridad con su futbolista y reclamando seguridad para toda la plantilla.  

En un primer momento, desde Tolima se quejaron de la actitud del equipo embajador, El presidente César Camargo dio que era un «boicot».  

El Tolima se retractó y en un comunicado expresó que el partido se tendría que disputar y no resolverse en el escritorio. 

Así las cosas, tras reunión del Comité Disciplinario, la decisión, es que sí habrá partido. El juego quedó programado para el próximo 29 de marzo, a las 8 p. m., en Ibagué, válido por la fecha 4 de la Liga.  

​El elemento clave para la deliberación del Comité fue el informe del árbitro Wílmar Roldán.  

El aparte clave de ese reporte sobre la realización del encuentro. 

“Teniendo en cuenta el acto de violencia, el cual aconteció por la falta de garantías de seguridad, decidimos como equipo arbitral suspender el inicio del juego”, dice Roldán en su informe. 

Esa frase le daba la razón a Millonarios en su decisión de abandonar el campo de juego y dirigirse al camerino: refuerza el argumento de que no había las garantías necesarias tras la abrupta entrada del fanático a la cancha. 

Además, el hecho de que Roldan hable de suspensión del inicio del partido ya abría las puertas a que el juego pudiera ser reprogramado por la Dimayor y así evitar que los puntos se entreguen en el escritorio. 

Queda pendiente conocer qué tipo de sanciones se impondrán por lo sucedido. Cataño se expone a una sanción de cuatro a diez partidos y a una multa entre cuatro y ocho salarios mínimos por agresión al público. 

Además, se espera anuncio respecto al hincha agresor y el estadio Manuel Murillo Toro. 

Aquí el video:

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