Se ha vuelto recurrente los casos de intolerancia en los escenarios deportivos; cada vez son más repetitivas las peleas, riñas y enfrentamientos que se registran, no solo a nivel profesional, sino también aficionado.
El hecho más reciente tuvo lugar en mientras se jugaba un grupo de jóvenes disputaban un partido de fútbol en cancha sintética.
Las emociones fueron subiendo de tono, a tal punto en el que dos jugadores acabaron a los golpes, rodeados por los demás asistentes que apoyaban la gresca.
Durante varios minutos, los involucrados se ‘levantaron’ a trompadas hasta quitarse la ‘rasquiña’ y ser separados por otros compañeros.
El hecho tuvo lugar en Barranquilla y la pelea se ha viralizado rápidamente en redes sociales; los internautas coinciden en comentar que afortunadamente la gresca se dio ‘limpiamente’ y “como en los tiempos de antes”, donde aseguran “nadie se metía y nadie sacaba cuchillos ni objetos contundentes”.