Quienes han hablado con Armando Benedetti Villaneda y lo han tenido como fuente de información saben que él lo decía: tenía pruebas que podían tumbar al Gobierno… pruebas de la campaña y de la vida personal del presidente Petro.
Por eso, a todos sorprendió la entrevista a la revista Cambio donde se interpretó como una exigencia del presidente Petro para acabar con esos rumores.
Negar lo que dijo le queda imposible a un Benedetti que se ha convertido en un activo tóxico para el Pacto Histórico y a quien nadie le va a recibir una llamada.
Además, él ya considera que ha recibido hostilidades como el de la visa a EE.UU. que le quitaron y lo cual fue el resultado de una queja del canciller, quien señaló que Benedetti usaba la visa para viajes personales y no oficiales.
La fiscalía lo citará esta misma semana para hablar del caso de Laura Sarabia y también se abrirá un nuevo proceso por los explosivos audios. Negar lo que dijo le será muy difícil.
Y los abogados dicen que su única salida será entregar pruebas y negociar un principio de oportunidad.