Administración municipal de El Banco interviene vías terciarias en mal estado

Las vías que llevan a los corregimientos de El Cedro, Aguaestrada, Menchiquejo y Caño de Palma, en El Banco, Magdalena, están en unos estados lamentables y difícilmente transitables. Se trata de una red vial terciaria de alrededor de 180 km, que está en un 95% de deterioro, a pesar de la temporada seca. Las primeras lluvias del año en curso han empeorado aún más la situación, dejando estas vías intransitables.

 

De igual manera, las carreteras que conectan al corregimiento de San José, Pueblo Nuevo, Guadalupe, Barranco de Chilloa, Caimanera, Botillero, Pueblo Bello, La Florida, Malpica, Hatillo de la Sabana e Islitas, hasta llegar a Caño de Palma, también están afectadas. Más de 24 km de estas vías son terciarias, y solo un kilómetro cuenta con placa huella, mientras que el resto son trochas llenas de agua y baches.

 

El viaje a estos corregimientos se ha vuelto una verdadera odisea. Las pérdidas en la agricultura y la pesca aumentan cada día con las lluvias, sumándose a las ya existentes por la temporada seca y la falta de apoyo. La situación se vuelve aún más grave en caso de enfermedad, ya que las ambulancias no pueden ingresar y las personas enfermas deben ser trasladadas en motocicletas para acceder a hospitales más especializados.

 

Ante este panorama, el gobierno de El Banco, liderado por el alcalde Ronald Darío Flórez Sierra, está haciendo esfuerzos para mejorar estas condiciones. Recientemente, se realizó un convenio interadministrativo entre la administración municipal y la Asociación de Juntas de Acción Comunal del Municipio – Asojunta, para el mantenimiento de vías rurales; la vía de El Cedro se encuentra priorizada en esta intervención. “Ya se firmó el acta de inicio, estamos en espera de que llegue la maquinaria para dar inicio a las actividades de mantenimiento”, indicó el mandatario.»

 

Los campesinos, líderes comunitarios, el alcalde y la comunidad en general de El Banco, están haciendo un llamado de auxilio al gobierno departamental y nacional para que, de manera conjunta, fortalezcan la presencia del Estado en esta zona que ha sido olvidada tanto por la administración departamental anterior como la actual, que a pesar de haber obtenido un gran respaldo de la comunidad durante la campaña, no ha regresado al municipio en los cuatro meses siguientes a su elección.